Uno de los sueños de todo usuario de app de mensajería es permitir tener un control absoluto de cómo se está viendo su contenido. Enviamos el texto, foto y vídeo a una persona, pero no sabemos lo que ocurre con ese contenido después, no sabemos si acabará en un grupo específico, o si se divulgará entre miles de personas… no sabemos nada.
Lo que muchas empresas están haciendo es permitir que un contenido desaparezca poco después de ser enviado, y eso es lo que está haciendo ahora Viber: permitiendo que los vídeos y las fotos puedan desaparecer después de que el destinatario los haya visto, sin darle tiempo, en teoría, a que lo guarde en su móvil para posterior distribución.
Esta función se llama «mensajes secretos», y permite a los usuarios designar qué fotos o vídeos permanecen en los archivos de una conversación antes de que se envíen. Viber ya permitía a los usuarios eliminar una conversación tanto de su propio teléfono como de los teléfonos de los destinatarios, pero ahora podemos configurar el contenido antes para que se envíe, sabiendo que tiene los segundos contados.
Podemos, por ejemplo, enviar una foto y configurarla para que desaparezca después de 1, 3, 7 o 10 segundos. Una vez transcurrido ese tiempo, el destinatario sabrá que se envió algo, pero no podrá ver qué. Con el vídeo ocurre algo semejante: desaparece después de que haya sido visto una única vez.
Viber, que cuenta con 800 millones de usuarios registrados, y 260 millones activos, es una de las empresas más innovadoras, junto a telegram, dejando a Whatsapp siempre en la cola, con el rótulo de «soy la última en implementar novedades».