Pam es el nombre de una nueva impresora 3D profesional con un alto precio pero con prestaciones suficientes para justificarlo: Impresión en simultáneo hasta con 4 materiales como fuente, opciones para combinar tales materiales creando gradientes y superficies especiales, manejo completo de diseños por imprimir a partir de una aplicación web -compatible con impresiones remotas-, calibración automática, velocidad de impresión de hasta 400 mm/s, un amplio espacio de trabajo y una precisión de hasta 40 micras (40 μ) para la generación de estructuras complejas.
Pam, diseñada por la compañía Pollen, es impulsada por algunos tarros tubulares con materiales granulados (termoplásticos, siliconas y compuestos industriales), materiales ambientalmente sostenibles que posibilitan el conseguir productos flexibles, transparentes y coloridos. Es más, como comentan en su sitio de promoción, se puede ocupar fibras naturales, de carbono, minerales, partículas metálicas y/o textiles para multiplicar las posibilidades en cuanto a resultados.
Se complementan sus opciones de producción con un software web, siempre actualizado y con almacenamiento en la nube, que prescinde de instalaciones pero aún así cuenta con funciones de control remoto, almacenamiento y gestión de los modelos generados, compatibilidad multiformato, características personalizadas vía API y una cómoda interfaz para su manejo.
En fin, no sobra echarle un vistazo a su video promocional para acercarse a sus procesos de producción. Por cierto, cada una de las primeras unidades de la impresora tiene un precio de 8.000 euros y se espera que para el 2017 se duplique dicho valor unitario:
Más información: Sitio web promocional de Pam