Entre polémica y polémica, Uber sigue creciendo, y llega ahora a los 62.500 millones de dólares, lo que se cree que puede valer la compañía después de haber recibido otros dos mil millones de inversión.
Uno de los argumentos que la compañía da a los inversores: tiene una tasa de proyección de ingresos de 10 mil millones a nivel mundial, implantando productos independientes en casa país, adaptados a la realidad cultural de cada zona. Los servicios que ofrece son extremadamente variados, desde el típico «taxi» hasta transporte de mascotas o entrega de productos, por lo que, al variar el modelo de negocio, las oportunidades crecen en diferentes ramas. Ahora parece que están trabajando en coches autónomos, y han invertido mucho para entrar en Asia, especialmente en China, donde la compañía espera invertir mil millones.
Lyft, el mayor rival de Estados Unidos de Uber, está tratando de recaudar 500 millones, de acuerdo con documentos analizados por Bloomberg el mes pasado, aunque parece que perdieron 127 millones en el primer semestre de 2015, con solo 46.7 millones en ingresos. Mientras tanto, Uber ha aumentado los ingresos brutos reales en Estados Unidos en alrededor de un 200 por ciento este año.
Uber, que lanzó su servicio hace más de cinco años, es rentable en más de 80 ciudades de todo el mundo, y parece que es imparable.