Pocos días faltan para el tan esperado lanzamiento de Windows 10 y esta semana, con el lanzamiento de la Build 10240, finalizó la parte del desarrollo previo del sistema.
Pues bien, un par de importantes noticias se han notado en esta versión “final” que seguramente no tendrá mayores cambios respecto a la que llegará a millones de computadores el próximo 29 de julio. Se trata del tema de las actualizaciones y el soporte a largo plazo de Windows 10.
Para Windows 10 Home, todo apunta a que se aplicará un sistema de actualizaciones automáticas sin posibilidad de desactivarlas pues en los términos de la licencia del SO se aceptará la descarga e instalación por defecto, de hecho, apenas se podrá configurar la hora del reinicio posterior.
Windows 10 Pro sí contará con una opción para disponer de algo de control sobre el proceso de la instalación de actualizaciones, por ejemplo, posponerlas, pero no será tan completo como del que sí gozarán las versiones empresariales de Windows 10. Surge entonces la pregunta: ¿hace falta alarmarse?
La respuesta a esta último tiende al NO pues las actualizaciones de seguridad automáticas ya se hacen presentes en Chrome OS, Firefox, iOS y otros sistemas, entonces no son algo nuevo y van de la mano con el reciente enfoque de Microsoft de ofrecer a Windows como servicio, además, podrían ser más ligeras y veloces.
Por otra parte, se ha confirmado que el soporte oficial de Windows 10 se mantendrá por 10 años más, hasta el 2025, pero solo hasta el 2020 se conseguirá actualizaciones en funcionalidades; a partir de ese año, solo se liberarán actualizaciones de seguridad.
Fuentes y más información: ArsTechnica y Neowin