Basta acceder al botón de la página principal y disfrutar de la sesión creada, sin necesidad de registro.
Cada sesión tiene una dirección diferente que, al divulgarla, permite incluir varias personas en la conversación. Los miembros deberán informar su idioma para que la aplicación realice las traducciones adecuadas.
Tanto la estética como la facilidad de uso del sistema me han encantado. Un uso muy inteligente de la herramienta de traducción de Google.