Anki es una empresa conocida por sus coches de control remoto, y quiere ahora entrar en el mundo de los «robots caseros» con el lanzamiento de Cozmo, una especie de Wall-E que puede adquirirse por 180 dólares.
De hecho se trata de un robot cuyos movimientos han sido diseñados por antiguos animadores de Pixar. Cuenta con inteligencia artificial y visión por ordenador para darle personalidad, siendo capaz de interactuar con el mundo que lo rodea. Puede reconocer rostros y recordar personas, así como explorar el entorno y jugar con bloques de juguete que vienen con el pack.
Cozmo aprende con el tiempo, por lo que en una primera fase cometerá errores de todo tipo, mostrando expresiones de frustración cuando así lo requiera. Es capaz de, poco a poco, conocer nuestra casa y aprender nuevos juegos, enfadándose cuando pierde en los mismos.
Cuenta con un solo brazo articulado para recoger objetos, aunque comentan que será posible poner otro tipo de «extremidades» en el futuro (no han especificado cuáles). Los sonidos que genera son procesados por una app para iPhone y Android, ayudando así a entender lo que el robot quiere decirnos.
Aunque de momento no deja de ser un juguete-mascota, es una clara demostración de cómo la inteligencia artificial va entrando en los hogares como en una nueva etapa post-furby. Se puede pedir ya mismo, pero solo se enviará en octubre en Estados Unidos.
Aquí tenéis el vídeo del «cómo se hizo»: