Cientí­ficos trabajan en el desarrollo de un tanque que podrí­a camuflarse igual que un camaleón

A continuación os mostramos el proyecto en el que está trabajando un grupo de cientí­ficos que tendrá tantos detractores como defensores, pero no podemos negar que desde un punto de vista tecnológico, se trata de una asombrosa muestra de hasta dónde puede llegar la ciencia. Estamos hablando del desarrollo de un tanque que, en un futuro, podrí­a camuflarse al igual que los camaleones.

Estamos hablando del PL-01, el concepto de un tanque inspirado en el camuflaje natural de los camaleones en el que está trabajando un grupo de cientí­ficos polacos. La idea es que este tanque sea capaz de camuflarse en tiempo real, cambiando de color dependiendo del color de los objetos de su entorno. Para ello, en lugar de estar pintado con la tí­pica pintura de camuflaje, estará cubierto de miles de láminas que cambiarán de color para mimetizarse. El objetivo es que estas láminas lleguen a ser completamente flexibles, de modo que pueda utilizarse para cubrir un vehí­culo del tamaño de un tanque o incluso para crear ropa para los soldados. Por ahora, sus responsables se encuentran trabajando en que cada una de estas láminas logre adaptarse al color de los objetos a su alrededor, y por el momento, únicamente se ha conseguido que los colores modificados sean visibles a través de una cámara infrarroja. Como vemos, el proyecto se encuentra todaví­a en una fase muy temprana de su desarrollo, y sus responsables han afirmado que todaví­a quedan varios años para que podamos ver un primer prototipo realmente funcional.

De salir adelante, los soldados y vehí­culos de las tropas militares que cuenten con esta tecnologí­a serí­an teóricamente invisibles al ojo enemigo, ya que la idea es que esta tecnologí­a funcione de forma realmente rápida para que sea efectiva incluso en vehí­culos o personas en movimiento.

El MIT desarrolla un modo de ocultar objetos casi perfecto

La invisibilidad y las técnicas avanzadas de camuflaje siempre han sido algo que ha despertado el interés de la sociedad. El mundo está lleno de objetos antiestéticos que serí­a mejor ocultar a la vista, tales como andamios, aparatos mecánicos y otros muchos objetos. La idea del MIT, el Instituto Tecnológico de Massachusetts, es justo esa, el poder ocultar todo tipo de objetos de la vista con el fin de que no sean vistos por nadie.

Para ello, han descubierto el modo de crear una especie de cubiertas de camuflaje imprimibles, que serí­an capaces de ocultar una gran cantidad de objetos gracias a unos complejos algoritmos, algo así­ como una especie de capa de invisibilidad al más puro estilo Harry Potter. Estos algoritmos serí­an los encargados de analizar el objeto que pretendemos ocultar, así­ como su entorno, con el fin de construir una imagen que combinarí­a y se adaptarí­a bastante bien al objeto. El problema con el camuflaje de objetos es que lograr ocultar algo por completo a los ojos humanos y que funcione independientemente del ángulo desde el que la persona lo mire es extremadamente complicado. No serí­a útil ocultar un objeto si tan solo permanece oculto si se mira desde una determinada posición o ángulo, ya que las personas nos movemos con total libertad en el entorno. Por ello, es en la multitud de ángulos diferentes desde los cuales se puede observar un determinado elemento donde reside la complejidad que tiene que resolver este algoritmo. Este se encarga de analizar los diferentes puntos de vista del espectador con el fin de averiguar cual serí­a la mejor imagen que harí­a que el objeto quedase oculto. Para llevar a cabo este análisis, se toman entre 8 y 20 fotografí­as desde diferentes ángulos. Tan pronto se han obtenido las imágenes, el algoritmo se encarga de encontrar el modo de combinar el objeto haciendo uso del entorno. Para ello, se tienen en cuenta la textura, el color, la forma, etc.

Para demostrar el funcionamiento del sistema se hizo la prueba que podemos ver en la imagen superior, en la que se intenta ocultar un cubo en una estanterí­a. Como podemos apreciar, -o más bien no se aprecia- el cubo se oculta por casi a la perfección. Si bien es cierto que podemos detectar donde se encuentra el objeto, se trata de un gran avance para el camuflaje que podrí­a dar mucho más de sí­ en un futuro.

Os dejamos con el video:

Crédito de la imagen: MIT