La Universidad de Brown es el escenario de una innovación tecnológica de proporciones oceánicas. En su búsqueda por desentrañar los misterios del profundo mar, un equipo de científicos ha desarrollado el Pleobot, un robot submarino inspirado en el krill, un pequeño crustáceo famoso por sus habilidades de natación.
Pleobot: la revolución acuática
Este fascinante autómata subacuático es fruto de la observación detallada de los movimientos y habilidades del krill. Sara Oliveira Santos, candidata a doctorado en la Escuela de Ingeniería de Brown y líder del equipo de desarrollo, ha sido la encargada de llevar a cabo esta investigación.
Inspiración natural
El krill se caracteriza por su increíble habilidad para nadar y su maniobrabilidad. La clave de su destreza reside en la natación metacronal, una técnica que implica el movimiento coordinado de múltiples apéndices o patas de manera secuencial, creando una especie de onda que empuja al organismo hacia adelante. Este movimiento permite al krill hacer grandes migraciones verticales de más de 1,000 metros dos veces al día.
El diseño de Pleobot
Pleobot es el resultado de la combinación de mecánica de fluidos, biología y mecatrónica. A pesar de ser diez veces más grande que un krill promedio (que es aproximadamente del tamaño de un clip de papel), Pleobot consigue replicar el movimiento natural de este crustáceo, utilizando una combinación de actuación activa y pasiva en sus articulaciones.
Un descubrimiento inédito
Además de producir el Pleobot, este estudio ha arrojado luz sobre un mecanismo desconocido hasta ahora: cómo los krill generan elevación mientras nadan para evitar hundirse, ya que son ligeramente más densos que el agua. Según los investigadores, una región de baja presión en la parte posterior de las patas de nado del krill contribuye a generar la fuerza de elevación necesaria.
Impacto y perspectivas futuras
La creación de Pleobot supone un salto evolutivo en la ingeniería de robots de navegación oceánica. Con la capacidad de explotar millones de años de evolución del krill, los investigadores ven en Pleobot una herramienta con un gran potencial. Podría revolucionar no solo nuestra comprensión de la vida marina en la Tierra, sino también en la exploración de océanos en otros planetas del sistema solar.
Esta investigación, además de su impacto en el mundo de la tecnología, nos recuerda el valor incalculable de la observación de la naturaleza y la riqueza de las soluciones que podemos encontrar en ella. Pleobot se presenta como un nuevo aliado en nuestra búsqueda incansable de conocimiento, tanto en los misterios del profundo océano como en los confines del universo.
Más información en nature.com y brown.edu.