El potencial de la energía marina en la lucha contra el cambio climático está recibiendo un impulso significativo. Con un 70% de la superficie terrestre cubierta por océanos, el poder de las olas y las mareas podría convertirse en uno de nuestros mayores recursos energéticos. Los científicos y los ingenieros han soñado durante décadas con encontrar formas de aprovechar una fracción de esta inmensa energía. Finalmente, en esta era de conciencia y preocupación por el clima, estamos empezando a prestar más atención a esta posibilidad.
Un Plan de Acción Oceánica para el Clima
El recientemente anunciado Plan de Acción Oceánica del gobierno de Biden revela cómo los océanos ofrecen un importante potencial para la energía renovable, tanto a través de la energía eólica marina como de otras fuentes menos exploradas, como las olas, las mareas y las corrientes marinas. Incluso las aguas frías que se encuentran en las profundidades de los mares tropicales podrían proporcionar energía marina limpia.
El Caso de PacWave: Transformando las Olas en Electricidad
Uno de los proyectos más destacados en el campo de la energía de las olas es PacWave, ubicado en la costa de Oregón. Se trata de un banco de pruebas experimental en alta mar que tiene como objetivo desarrollar y demostrar nuevas tecnologías para convertir la energía de las olas en electricidad en tierra firme. La construcción de este proyecto está cerca de su finalización, con la instalación de 7 millas de conductos bajo el lecho del océano Pacífico utilizando técnicas pioneras de perforación horizontal. Una vez que esté completamente operativo, se espera que PacWave pueda generar hasta 20 megavatios, suficientes para abastecer a varios miles de hogares.
La Gran Promesa de la Energía de las Olas
La energía de las olas tiene un potencial significativo para convertirse en una fuente importante de electricidad renovable. Sin embargo, aún quedan desafíos por superar. Aunque las olas son constantes, no son idénticas, lo que plantea un desafío clave a la hora de diseñar máquinas capaces de capturar su energía. Diferentes enfoques están siendo explorados, como dispositivos que se deslizan sobre la cima de las olas, aquellos que convierten la presión de las olas sobre el lecho marino en energía, o dispositivos conocidos como columnas de agua oscilantes, que comprimen el aire a medida que las olas pasan a través de ellos, haciendo girar una turbina y generando energía.
El Potencial de la Energía Térmica del Océano (OTEC)
Además de la energía de las olas, otra forma de energía marina que está captando interés es la conversión de la energía térmica del océano (OTEC, por sus siglas en inglés). Esta tecnología aprovecha las diferencias de temperatura entre las aguas profundas y superficiales del océano para generar electricidad. Aunque el OTEC fue pionero en la década de 1970, no se ha adoptado ampliamente. Sin embargo, el cambio climático ha impulsado un renovado interés en esta tecnología, que podría ser especialmente adecuada para islas como Puerto Rico, Guam y pequeñas naciones del Pacífico Sur. Se espera que los nuevos compromisos gubernamentales y los avances tecnológicos aceleren su desarrollo y adopción.
Energía de las Mareas y Corrientes: Predecible y Confiable
La energía de las mareas es otra forma de energía marina que ha alcanzado un mayor grado de desarrollo. Mediante la colocación de turbinas en lugares estratégicos donde el flujo de las mareas es rápido, se puede generar electricidad de manera confiable y predecible. Aunque las mareas tienen un potencial más limitado en términos de ubicaciones geográficas, en los lugares donde es viable, es una forma de energía renovable altamente confiable.
Desafíos y Consideraciones
Si bien la energía marina ofrece un enorme potencial como fuente de energía renovable, también plantea desafíos y consideraciones. Uno de los principales desafíos es la incertidumbre, ya que aún no se ha implementado a gran escala, lo que lleva a preguntarse cuáles serán los impactos ambientales y sociales de la infraestructura de energía marina. Además, es necesario garantizar que se minimice cualquier impacto negativo en la vida marina, el medio ambiente, las poblaciones locales y las industrias pesqueras.
La energía marina se vislumbra como una prometedora frontera para la energía renovable. Aunque todavía hay desafíos técnicos y consideraciones ambientales que abordar, el avance en tecnología y la creciente conciencia sobre el cambio climático están impulsando la exploración y desarrollo de los recursos energéticos marinos. La energía de las olas, las mareas, las corrientes marinas y la energía térmica del océano tienen un potencial significativo para reducir nuestra dependencia de los combustibles fósiles y mitigar los efectos del cambio climático. Al acelerar la implementación de tecnologías marinas, podemos allanar el camino hacia un futuro sostenible y demostrar nuestro compromiso con un planeta más limpio y saludable.