El Sol es una fuente impresionante de energía, y cada vez se hacen más esfuerzos para aprovecharlo. Son movimientos tímidos, ya que los intereses globales por la industria del petroleo frenan bastante cualquier iniciativa, pero aún así de vez en cuando aparecen proyectos que merecen su divulgación.
Los girasoles se inclinan hacia el sol gracias a lo que se llama fototropismo, y eso es lo que se ha intentado al simular un «girasol» artificial (SunBOT) sensible a la luz que puede capturar energía solar.
New Scientist informa que el diseño, que tiene un tamaño micro de menos de un milímetro de diámetro (cada SunBOT tiene menos de 1 milímetro de ancho), utiliza materiales que se expanden y contraen con el calor para doblarse hacia la luz del sol.
Cuando parte del tallo de un SunBOT está expuesto a la luz, se calienta y se contrae. Esto hace que el tallo se doble y apunte la flor artificial hacia la luz. El vástago deja de doblarse una vez que SunBOT está alineado con la luz porque la flexión crea una sombra que permite que el material se enfríe y deje de encogerse.
El proyecto se ha publicado en Nature Nanotechnology, donde explican los detalles de los materiales inteligentes sensibles que consiguen imitar el fototropismo natural de las plantas.
El poder usar de forma efectiva materiales inteligentes para hacer girar los colectores solares hacia el sol puede significar una recolección y uso más eficiente de la energía solar. Los paneles solares estáticos se montan en una ubicación y ángulo específicos y no se pueden mover desde esa posición, pero con paneles de seguimiento podemos olvidarnos del tema y dejar que ellos mismos miren a la posición ideal para que la energía obtenida sea máxima. Se cree que los paneles de seguimiento son 15 a 30 por ciento más efectivos en la recolección de energía solar.
La pequeña nanotecnología de girasol presentada por Ximin He y su equipo de la Universidad de California, puede ofrecer nuevos casos de uso para la recolección de energía solar. Su equipo descubrió que los girasoles aumentaron el potencial de recolección sobre paneles solares oblicuos estáticos en un 400 por ciento, lo que puede ponerlos a la par con los paneles de seguimiento tradicionales de uno o dos ejes.
De esta forma parece que los paneles solares del futuro podrían estar hechos de hileras de pequeños girasoles artificiales que se doblan automáticamente hacia la luz.
Imagen: montaje con fotos de depositphotos