Ya tenemos en la redacción la nueva impresora de Anet, la Anet ET4, una impresora que llama la atención por su bajo precio, su robustez y sus sensores.
La impresora llegó semi montada, solo invertimos 15 minutos en montarla completamente y ponerla a funcionar, algo que se agradece, porque la anterior la recibimos desmontada pieza por pieza y tardamos varios días en dejarla lista.
Lo primero que llama la atención, además de su estructura metálica, es el sistema de nivelado automático, posible gracias a un sensor que no estaba disponible en el modelo anterior. Solo tenemos que ponerlo en el cabezal de impresión y pulsar el botón de nivelado automático para que la impresora se calibre de forma automática tocando 25 puntos de la base, de 20×20 cm.
Una vez calibrada, y es algo mucho más fácil de hacer que en la Anet A8, llega el momento de imprimir, y en este caso no tenemos que preocuparnos si la impresión es muy larga, ya que podemos pararla y seguir otro día, con la garantía de que continuará por donde lo dejó la última vez.
Cuenta también con un sistema de detección de filamento, de forma que cuando se detecta que no hay, se envía un aviso a la pantalla solicitando carga del nuevo hilo, sin temor de que la pieza que está imprimiéndose se pierda, ya que una vez cargado el nuevo filamento, seguirá la impresión normalmente.
En lo que se refiere a la protección cuenta con sistemas para evitar sobrecorriente, protección contra sobrecarga, protección contra sobretemperatura y una alarma de sobrecalentamiento. De hecho la impresora se apaga automáticamente si se detecta una temperatura muy alta en determinados momentos, evitando accidentes.
El filamento no llega de forma abierta al cabezal, pasa por dentro de una pieza responsable por conducirlo dentro de un tubo blanco que llega hasta la sección de impresión, garantizando así que entra siempre con el ángulo correcto.
Sobre la pantalla: es de 2,8 pulgadas, y muestra varias secciones que no tenía la versión anterior. Podemos desde allí calibrarla, extraer filamento, controlar la temperatura, enviar a impresión, pausar o parar el trabajo, ajuste del ventilador… varias funciones que dan mucho más control que con la A8.
Los puertos son los mismos que antes, USB y tarjeta MicroSD para poder enviar el contenido que queremos imprimir.
Otro punto importante a destacar es el poco ruido que hace. La impresora que llegó a la redacción tiene el controlador TMC2208, que ahora solo está disponible en la tienda virtual oficial de Anet, y hace que la impresión sea más silenciosa que con modelos anteriores.
La calidad de impresión depende como siempre de la configuración que pongamos en el software. En nuestro caso usamos Cura 14.07, y hemos obtenido muy buenos resultados con piezas grandes.
Con las piezas más pequeñas hay que reducir la velocidad de impresión, y jugar bastante con la temperatura, grosor y demás factores que afectarán en los detalles como narices, ojos y pelo de las miniaturas.
Para impresiones de tamaño medio hemos conseguido imprimir y pintar figuras sin ningún problema.
Pero lo más impresionante es el precio: 150 euros en anet3d.com.