Lo que comenzó en su momento como un editor de código experimental de calidad basado en las tecnológicas web modernas ha pasado a convertirse en una importante herramienta de desarrollo de código usado mensualmente por más de 500.000 desarrolladores en todo el mundo, desde pequeños desarrolladores hasta importantes compañías.
Desde que fue anunciado en el evento para desarrolladores de Microsoft Build 2015, Visual Studio Code ha ido evolucionando en el tiempo donde, entre otros aspectos, adoptó el soporte para extensiones, lo que le ha posibilitado disponer de soporte para otros lenguajes de programación más allá de JavaScript y TypeScript, soportados de serie, además de haberse liberado su código a través de GitHub.
Hoy ha tocado el momento de llegar a la versión 1.0, eliminándose la etiqueta beta que ha venido arrastrando desde su lanzamiento público. Acorde a Microsoft, se han llevado a cabo los esfuerzos necesarios para que la nueva versión sea un gran editor para todos los desarrolladores.
En este sentido, cabe señalar que Visual Studio Code no está sólo disponible para Windows, ya que dispone de versiones para las plataformas de escritorio Linux y Mac. Además, en esta versión también se han cuidado aspectos relativos a la accesibilidad a través del soporte para la lectura en pantalla, entre otras características.
Microsoft seguirá, junto con la comunidad, ofreciendo mejoras en aspectos como el rendimiento, estabilidad, accesibilidad y compatibilidad, que se verán reflejados en las sucesivas versiones que vayan lanzando de Visual Studio Code.