La primera vez que se escuchó el término Li-Fi fue en 2011, cuando el profesor Harald Haas comenzó a hablar de comunicación entre dispositivos usando LED. El proyecto no ha parado de evolucionar, y ahora os explicamos cómo funciona y qué ventajas tiene.
Cuando usamos varios routers en un mismo ambiente, pueden producirse interferencias, pero si usamos LEDs, estamos libres de ellas. El objetivo es permitir ajustar la frecuencia y la intensidad de este tipo de luz para que otros dispositivos sean capaces de captar información, y ya hay varias empresas que están trabajando en el tema. En un reportaje publicado hoy en la BBC hablan de dos de ellas: Disney Research y el Fraunhofer Institute.
Si vemos los avances realizados por la primera de estas dos empresas, nos encontramos con varios artículos en los que se comentan sus posibilidades. Disney está trabajando con esta tecnología para que la comunicación entre juguetes sea más barata y fiable, siendo posible, por ejemplo, apuntar con una varita mágica a una muñeca y ver una reacción inmediata, o permitir que varios coches de juguete se comuniquen entre ellos emitiendo y recibiendo luz.
Tanto los emisores como los receptores son bastante baratos, por lo que se trata de desarrollar software suficientemente inteligente como para interpretar los pulsos de luz a la velocidad adecuada.
Existen problemas que esta tecnología no podrá solucionar, como la necesidad de existir contacto visual para recibir la luz de los LED, pero el hecho de no necesitar hardware extra, y de permitir que la luz del flash de un móvil funcione como emisor de datos, es un punto a favor que no puede ignorarse.