El CEO de OpenAI, Sam Altman, ha estado hablando mucho últimamente sobre cómo la inteligencia artificial puede cambiar el mundo, y en su último post ha llevado esto a otro nivel, entrando en lo que algunos llaman «modo dios». Altman, cuya compañía está cerca de alcanzar una valoración de $150 mil millones, ha pasado de ser un fundador de startups a un visionario que imagina un futuro en el que la IA resolverá todos los problemas del mundo. Pero, ¿cuánto de lo que dice es creíble y cuánto es simplemente exageración?
Promesas de Altman: ¿realidad o exageración?
En su último post, Altman hizo una serie de promesas sobre lo que la IA será capaz de lograr, desde resolver problemas difíciles hasta crear una prosperidad compartida inimaginable. A continuación, analizamos algunas de esas promesas y determinamos si son realistas o si solo son un intento de vendernos un futuro idealista.
1. «La IA nos ayudará a resolver problemas difíciles»
Este es uno de los puntos más creíbles que hace Altman. La IA ya está siendo utilizada en campos como la medicina y la ingeniería, ayudando a los expertos a encontrar soluciones a desafíos complejos. Sin embargo, queda por ver si esos «problemas difíciles» serán siempre cosas tan importantes como curar enfermedades o si simplemente ayudarán a los niños a hacer trampa en sus tareas.
2. «Pronto podremos trabajar con IA que nos ayude a lograr mucho más»
Es un hype (exageración), pero con un toque de verdad. Usar nuevas herramientas, como la IA, nos permitirá hacer más cosas, pero eso no significa necesariamente que será de forma inmediata o tan eficiente como se promete. Muchas empresas aún están en proceso de averiguar cómo la IA puede mejorar sus procesos y, en su estado actual, la tecnología aún está lejos de cumplir estas expectativas.
3. «Tendremos un equipo personal de IA lleno de expertos virtuales»
Aquí es donde el hype realmente empieza. La idea de tener un equipo personal de IA suena impresionante, pero la realidad es que esos «expertos virtuales» probablemente estarán recopilando información de expertos reales y simplemente resumiéndola. No podemos olvidar que la creatividad y el juicio humano no son algo fácil de replicar.
4. «Nuestros hijos tendrán tutores virtuales»
Esto es creíble. Ya estamos viendo cómo los chatbots y sistemas de IA están siendo utilizados en la educación, y aunque no reemplazan a un tutor humano, pueden ser una solución accesible para aquellos que no pueden permitirse uno. Sin embargo, este tipo de roles necesitará ser cuidadosamente definido para evitar problemas como la difusión de información incorrecta.
5. «La IA mejorará la atención médica»
Este es otro ejemplo de hype. Aunque es posible que la IA ayude en el ámbito médico, como en la creación de software o en el diagnóstico de enfermedades, afirmar que revolucionará completamente la atención médica es, en este punto, especulativo.
El verdadero impacto de la IA
Uno de los puntos más discutidos por Altman es que la IA traerá una prosperidad compartida como nunca antes habíamos visto. Aquí es donde la mayoría de los expertos se muestran escépticos. Aunque es cierto que la IA tiene el potencial de cambiar la manera en que trabajamos y vivimos, también es probable que cause pérdida de empleos en algunos sectores antes de crear nuevas oportunidades.
Altman también menciona que la superinteligencia podría estar a solo unos miles de días de distancia. Para muchos, este es el punto en el que su discurso parece alejarse de la realidad. Los críticos de la IA argumentan que la inteligencia general artificial (AGI), la que equipararía la capacidad de la IA con la humana, podría no llegar nunca o, si lo hace, no será tan impactante como se promete.
¿Hacia una nueva era de inteligencia?
Altman se refiere al futuro como la «Era de la Inteligencia», donde la IA cambiará todo, desde la forma en que trabajamos hasta cómo vivimos. Pero, por ahora, muchos expertos y consumidores se muestran escépticos. Si bien la IA ya ha mostrado avances significativos, la realidad es que estamos todavía en los primeros pasos de entender cómo esta tecnología puede realmente integrarse en nuestras vidas de manera efectiva y justa.
Mientras tanto, es importante mantener una mirada crítica hacia las promesas que se hacen, especialmente cuando vienen acompañadas de grandes intereses financieros y tecnológicos.