Después de un largo receso de 47 años, Rusia ha decidido volver a la exploración lunar con su misión Luna 25. Esta misión no solo marca un hito en la historia espacial rusa, sino que también representa un avance en la tecnología de exploración lunar. La nave orbitará a una altitud de aproximadamente 100 kilómetros sobre la superficie lunar, ofreciendo una perspectiva única del satélite natural de la Tierra.
Detalles del lanzamiento
El vehículo de lanzamiento elegido para esta misión ha sido el cohete Soyuz-2 Fregat. El despegue se realizó desde el centro de lanzamiento Vostochny, ubicado en el Lejano Oriente de Rusia. Tras el lanzamiento, se espera que la nave llegue a la luna en un plazo de 5,5 días.
Objetivos de la misión
Uno de los principales objetivos de esta misión es perfeccionar la tecnología de aterrizaje suave en la superficie lunar. Si todo va según lo planeado, Luna 25 podría ser la primera nave en llegar al Polo Sur de la luna. Pero eso no es todo, la misión también tiene como objetivo buscar recursos valiosos en la luna, como el agua. Esta búsqueda no solo es crucial para futuras misiones tripuladas, sino que también puede ofrecer información sobre la formación y evolución de la luna.
Tecnología a bordo
La Luna-Glob-Lander, como también se conoce a la Luna 25, está equipada con tecnología de vanguardia. Posee varias cámaras que capturarán imágenes detalladas y vídeos de la superficie lunar. Estas cámaras ofrecerán una visión sin precedentes del paisaje lunar, lo que será invaluable para futuras misiones.
La NASA, en una declaración, proporcionó detalles sobre el diseño de la nave. El aterrizador tiene una base de cuatro patas que contiene los cohetes de aterrizaje y los tanques de propelente. Una característica destacada es el Brazo Robótico Lunar que puede recolectar muestras del suelo lunar hasta profundidades de 20 a 30 cm.
Implicaciones globales
El regreso de Rusia a la exploración lunar no ha pasado desapercibido en el escenario mundial. En un momento en que las tensiones políticas están en su punto más alto, especialmente con la situación en Ucrania, este lanzamiento es una declaración de las capacidades y ambiciones espaciales de Rusia. Mientras que Europa y América buscan formas de aislar a Rusia, este país busca fortalecer sus lazos con naciones no occidentales.
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