SpaceX logra un lanzamiento suborbital exitoso del Starship, pero no aterriza y explota

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SpaceX, la compañía de transporte espacial fundada por Elon Musk, ha alcanzado un hito histórico al completar con éxito el primer lanzamiento suborbital integrado de su cohete Starship. El lanzamiento tuvo lugar en el sitio de prueba de Boca Chica, Texas. A pesar de no alcanzar la órbita, este evento marca un paso importante en el desarrollo de esta nave espacial de próxima generación y sienta las bases para futuros lanzamientos orbitales y misiones a Marte.

Starship y Super Heavy

Starship es el componente superior de la nave espacial de SpaceX y está diseñado para transportar tanto carga como tripulación a destinos terrestres, lunares y eventualmente a Marte. La nave espacial cuenta con un diseño reutilizable y está construida con acero inoxidable, que proporciona una mayor resistencia y durabilidad.  Starship está diseñado para albergar hasta 100 personas y cuenta con un volumen de carga útil de aproximadamente 1,100 metros cúbicos.

El Super Heavy es el cohete de refuerzo de primera etapa del sistema Starship, y es también el cohete más potente jamás construido por SpaceX. Es responsable de llevar al Starship a través de la atmósfera terrestre y a gran velocidad antes de que la segunda etapa (Starship) se separe y continúe hacia su destino. Este refuerzo cuenta con hasta 32 motores Raptor, que le otorgan una capacidad de carga útil de más de 100 toneladas métricas al espacio.

Detalles del lanzamiento y de la explosión


El lanzamiento suborbital tuvo lugar hoy, el 20 de abril de 2023 en el sitio de prueba de Boca Chica, Texas. Esta ubicación ha sido el centro de las pruebas de vuelo de Starship desde sus primeras etapas de desarrollo.

Aunque el objetivo final de SpaceX es llevar a Starship y Super Heavy a la órbita terrestre, este lanzamiento en particular fue diseñado como una prueba suborbital para evaluar el rendimiento de ambos vehículos y su integración. La misión también buscó probar los sistemas de aviónica, propulsión, estructuras y sistemas de vuelo durante las diferentes fases de lanzamiento, ascenso y aterrizaje.

Si bien la misión no alcanzó la órbita, SpaceX logró completar con éxito el primer lanzamiento integrado de Starship y Super Heavy.  Por desgracia la nave espacial se salió de control antes de estallar en una bola de llamas unos cuatro minutos después de su vuelo, acortando la prueba.

Podéis ver el momento de la explosión en este enlace

Como veis, el cohete perdió el control y no pudo separarse Super Heavy de Starship, como estaba previsto. A pesar de que el despegue y el apagado de los motores de la primera etapa se desarrollaron con normalidad, el vehículo completo empezó a girar sobre sí mismo, lo que resultó en su caída en aguas del Golfo de México. Aún se desconocen las causas del accidente y no se espera un tercer intento de prueba exitosa para este vehículo pionero.

Reutilización y reducción de costos

Uno de los principales objetivos de SpaceX con el sistema Starship y Super Heavy es la reutilización de ambos componentes para reducir los costos de lanzamiento y hacer que los viajes espaciales sean más accesibles. Este lanzamiento suborbital exitoso marca un paso crucial en la validación de la reutilización y la durabilidad de estos vehículos, lo que podría conducir a una reducción significativa en los costos de acceso al espacio.

Misiones futuras

Con este lanzamiento exitoso, SpaceX está más cerca de realizar misiones tripuladas y no tripuladas a la Luna, Marte y más allá. En particular, el programa Artemis de la NASA ha seleccionado a Starship como uno de los vehículos que transportarán a astronautas a la superficie lunar en la próxima década.

Elon Musk ha expresado su ambición de enviar misiones tripuladas a Marte utilizando el sistema Starship en la década de 2030, parece que vamos por buen camino.