El famoso empresario Elon Musk ha fundado una nueva compañía llamada X.AI, enfocada en el desarrollo de inteligencia artificial (IA). La creación de esta empresa ha generado gran expectativa, ya que se espera que compita directamente con OpenAI, la cual fue cofundada por el propio Musk en 2015.
X.AI: El nacimiento de una nueva empresa de IA
X.AI fue incorporada en Nevada el mes pasado, según documentos obtenidos por The Wall Street Journal. Elon Musk figura como director de la compañía, mientras que Jared Birchall, director de la oficina familiar de Musk, aparece como secretario.
Antes de confirmarse la fundación de X.AI, ya circulaban rumores sobre los planes de Musk para crear una compañía de IA. Estos rumores se intensificaron cuando se dio a conocer que el empresario había adquirido miles de unidades de procesamiento gráfico (GPUs) para un proyecto de IA generativa. Además, se informó que Musk había contratado a dos exinvestigadores de DeepMind en marzo, incluyendo al científico Igor Babuschkin, quien se cree liderará el nuevo proyecto.
Enfrentamiento con OpenAI
A pesar de haber cofundado OpenAI, Elon Musk se separó de la organización en 2018. Desde entonces, ha mostrado su desacuerdo con algunas de las acciones de la compañía, especialmente en relación con el desarrollo de la tecnología ChatGPT.
Recientemente, Musk firmó una carta abierta en la que pedía una pausa de seis meses en el desarrollo de «experimentos gigantes de IA». El empresario ha manifestado su preocupación por el sesgo político de ChatGPT y ha abogado por la creación de modelos de IA que busquen la verdad.
El futuro de X.AI y la competencia en el campo de la inteligencia artificial
Aunque los planes específicos de X.AI aún no están claros, se sabe que Musk ha iniciado conversaciones con inversores de Tesla y SpaceX para financiar su nueva empresa. También se ha informado que adquirió 10,000 GPUs para el desarrollo de IA en uno de los centros de datos de Twitter.
La entrada de Elon Musk en el mundo de la inteligencia artificial, con la creación de X.AI, es un claro indicativo de que la competencia en este ámbito será cada vez más intensa. Su postura crítica hacia OpenAI podría conducir a una rivalidad que impulse el desarrollo de tecnologías de IA aún más avanzadas y eficientes.
La fundación de X.AI también plantea preguntas interesantes sobre cómo la ética y la búsqueda de la verdad en la inteligencia artificial serán abordadas en el futuro. La aparición de empresas como X.AI, que buscan un enfoque más responsable en el desarrollo de la IA, podría ser clave para garantizar un equilibrio en la aplicación y evolución de estas tecnologías.