Dell tiene la intención de dejar de usar chips fabricados en China para 2024 y ha solicitado a sus proveedores que reduzcan la cantidad de otros componentes en su hardware que han sido fabricados en ese país, en medio de las preocupaciones existentes sobre la tensión geopolítica entre Estados Unidos y el gigante asiático.
La multinacional estadounidense comunicó esta decisión a sus proveedores a finales del año pasado, señalando que su objetivo de reducir significativamente la dependencia sobre estos componentes incluye aquellos chips producidos en China por empresas extranjeras, según un reporte que cita a tres fuentes relacionadas con el caso.
Dell quiere cortar su dependencia con el hardware fabricado en China
Un informe publicado recientemente por Nikkei Asia, reveló que Dell, considerado el tercer fabricante de ordenadores más grande del mundo, comunicó a finales de 2022 a sus proveedores que están realizando esfuerzos para diversificar su cadena de suministros, con el objetivo de»reducir significativamente» la cantidad de chips fabricados en China que utilizan.
«El objetivo es bastante agresivo. El cambio determinado involucra no solo los chips que actualmente fabrican los fabricantes de chips chinos, sino también las instalaciones en China de proveedores no chinos», comentó una persona con conocimiento directo del asunto. «Si los proveedores no tienen medidas de respuesta, eventualmente se podrían perder pedidos de Dell», dijo también la fuente con identidad reservada, en relación al riesgo que implica esta determinación.
Además de los chips, Dell ha pedido a los proveedores de otros componentes, como módulos electrónicos y placas de circuitos impresos, así como también a los ensambladores de sus productos, que apoyen su búsqueda de alternativas viables para traspasar su cadena productiva a países más allá de China, como Vietnam, según las fuentes de Nikkei.
«Hay miles de componentes para computadoras portátiles, y el ecosistema fue tan maduro y completo en China durante años», dijo a la publicación económica un ejecutivo de un proveedor de chips, que trabaja no sólo con Dell. sino que también con marcas como HP. «Anteriormente sabíamos que Dell tenía planes de diversificarse de China, pero esta vez es un poco radical. Ni siquiera quieren que sus chips se fabriquen en China, citando preocupaciones sobre la política del gobierno de EE. UU…. No es solo una evaluación, no es un lobo aullador. Es un plan real y continuo, y esta tendencia parece irreversible», agregó.
Nikkei Asia consultó directamente a Dell sobre sus planes al respecto. La compañía declaró: «Exploramos continuamente la diversificación de la cadena de suministro en todo el mundo que tenga sentido para nuestros clientes y nuestro negocio». También, resaltaron «China es un mercado importante en el que tenemos miembros del equipo y clientes para atender».
Dell no hizo comentarios en detalle sobre sus planes de diversificación, pero dijo que «para satisfacer mejor las necesidades y expectativas de nuestros clientes y socios, tenemos diversidad geográfica, flexibilidad y estabilidad integradas en nuestra cadena de suministro global».
Según el citado reporte, hasta hace poco tiempo, la procedencia de los chips no era un tema que realmente preocupara a los fabricantes de ordenadores. Sin embargo, la “guerra tecnológica” que se está gestando entre estas dos potencias, impulsada por temas políticos y económicos de gran tenor, de seguro terminará por reconfigurar radicalmente el panorama del hardware global.