Desde que hace un mes Elon Musk firmara un acuerdo con Twitter comprometiéndose en comprar el 100% de las acciones por 44 000 millones de dólares, muchas cosas han ocurrido.
El ímpetu inicial de Musk ha perdido fuerza, y lleva varios días poniendo escusas para no cerrar la compra. La principal hace referencia a la cantidad de spam y bots que hay en la plataforma, un número que inicialmente se estimó en un 5% del total de usuarios, mientras que expertos creen que podría llegar al 15% o más.
Twitter publicó en su cuenta que Elon Musk firmó el acuerdo en su momento optando a no hacer preguntas sobre el negocio de la compañía, por lo que no tiene sentido que ahora quiera cerrar un trato con su «mejor y última» oferta, cuando ya definió que pagaría 54,20 dólares por acción (ahora mismo valen un 30% menos).
Musk tuiteó el martes que el presidente ejecutivo de Twitter, Parag Agrawal, se negó a mostrar pruebas de la estimación de su compañía y que el acuerdo no puede avanzar hasta que lo haga. El problema es que cuando firmó el acuerdo no hizo ningún esfuerzo por obtener información sobre el problema.
Twitter informa:
El Sr. Musk no solicitó celebrar un acuerdo de confidencialidad ni buscó en Twitter ninguna información no pública sobre Twitter.
El caso es que los inversores de Twitter parecían convencidos de que no habría discusión posterior. Seguramente ya han celebrado por todo lo alto la venta de Twitter, pero ahora está todo en el aire, porque Musk ya sugirió el lunes que el trato podría hacerse a un precio más bajo, aunque no ha informado oficialmente que quiere renegociar el acuerdo.
Los expertos legales han dicho que Musk probablemente perdería en la corte si intentara alejarse del contrato, pero el litigio sería prolongado y generaría incertidumbre sobre el negocio de Twitter. Sea como sea, Musk está obligado por contrato a pagar una tarifa de ruptura de 1 000 millones de dólares, y aún así Twitter puede demandarle para obligar a Musk a completar el trato y obtener un acuerdo.
Twitter ya dijo en su momento que el 5% de cuentas bot y spam era estimado, por lo que en ningún momento mintió sobre el tema.
Los representantes de Musk no respondieron a las solicitudes de comentarios, pero seguramente Musk no tardará en seguir con la historia en su propia cuenta de Twitter.