Hay muchas cosas que aún se desconocen de la física cuántica. Se sabe cómo funciona a grandes rasgos, pero se desconocen muchas explicaciones que justifiquen lo que se recibe en las observaciones. Son nuevas leyes de la física, muy diferentes de las que nos rodean en el «mundo normal», que pueden ayudar a crear nuevos dispositivos y avanzar en el mundo de la ciencia y de la tecnología.
Ahora un equipo de investigadores ha desarrollado una nueva técnica de construcción de silicio para que sea más barato crear chips para computadoras cuánticas.
La nueva técnica parece salida de un libro de ciencia ficción: se ponen átomos individuales, uno por uno, en obleas de silicio.
Publicada en la revista Advanced Materials, esta técnica aprovecha la precisión del microscopio atómico para rozar la superficie de un chip con la precisión de la mitad de un nanómetro, espacio existente entre átomos en un cristal de silicio.
El proceso comenzó casi por casualidad, al ver una señal que ocurría cada vez que un átomo caía en la superficie. Amplificaron dicha señal y consiguieron controlar el proceso con equipos que incluyen detectores de rayos X sensibles y un microscopio de fuerza atómica que se desarrolló originalmente para la misión espacial Rosetta.
Ahora creen que pueden crear un «chip» qubit de forma más barata, ya que hasta ahora se fabricaban implantando muchos átomos en ubicaciones aleatorias y seleccionando los que funcionaban mejor. A partir de ahora se podrán poner en una matriz ordenada, como se hace con los transistores en los chips de toda la vida.
El objetivo es fabricar máquinas a gran escala basadas en bits cuánticos de un solo átomo, aunque aún deben pasar algunos meses antes de que pueda comenzar este proceso de fabricación en masa.