Cómo avanza la llegada de soluciones de tarjetas bancarias inteligentes

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Tarjeta bancaria

Como hemos visto a lo largo de estos últimos años, algunas de las principales firmas tecnológicas han ido uniéndose al ecosistema de servicios financieros lanzando sus propias soluciones de tarjetas inteligentes.

Apple ha sido la que inició esta tendencia con el lanzamiento de Apple Card, su tarjeta inteligente vinculada a su sistema de pagos Apple Pay, ofreciéndose tanto como tarjeta física tradicional como tarjeta virtual, como os comentamos en este artículo.

Con el tiempo se fueron sumando otras, como Google, Samsung o Huawei. Pero la competencia no se detendrá aquí, teniendo en cuenta los éxitos que cosechan en particular tanto Apple como Samsung con sus respectivas soluciones.

Tecnológicas buscando tener éxito con servicios financieros

En este sentido, la firma de móviles Oppo también se encuentra trabajando para entrar en el segmento de los servicios financieros bajo Oppo Card, y ahora conocemos además que Vivo, otra marca de móviles de origen chino, también está trabajando para entrar también en el segmento de los servicios financieros.

En el caso de Vivo, acorde a DroidMaze, la marca se encuentra registrando la marca VivoCard para llegar a utilizarla tanto en su mercado local como incluso en mercados internacionales.

Esto supondrá una competencia más a todas las soluciones de tarjetas inteligentes que ya existen en el mercado para proporcionar formas de pago cómodas y de gestión económica, entre otras muchas capacidades financieras, aunque de momento no se conoce de manera exacta todo lo que llegará ofrecer Vivo bajo VivoCard.

Lo que si se sabe es que será parecido a lo que ya ofrece en la actualidad Apple Card, incluyendo una tarjeta física como una virtual, por lo que ya será los acuerdos a los que llegue con entidades bancarias y otros actores lo que marque la estrategia concreta de la compañía en su desembarco en los servicios financieros.

No cabe duda de que la competencia hará que el resto de soluciones tengan que luchar para mejorar sus prestaciones, como ya vemos en otros segmentos, como en el de la transmisión de música o de contenidos audiovisuales.

Sin la competencia, no habríamos llegado hasta donde estamos hoy en lo que respecta a la utilización de distintos servicios basados en la nube.

Es de prever que en el segmento de los servicios financieros proporcionados por firmas tecnológicas llegue a ocurrir un tanto de lo mismo, redundando en beneficio de los usuarios, y más en un momento donde se está potenciando el auge del comercio electrónico como alternativa a las compras en los establecimientos físicos.

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