Dinamarca construirá una isla artificial capaz de generar tanta energía limpia que podría atender las necesidades energéticas de 10 millones de hogares en toda Europa
Lo ha anunciado la Agencia Danesa de Energía hace pocas horas, una isla artificial en el Mar del Norte, a 50 millas de la costa de la península de Jutlandia, de 120.000 metros cuadrados capaz de suministrar 10 GW.
La isla artificial recibirá, almacenará y transmitirá energía de los parques eólicos cercanos a la costa gracias a una inversión de alrededor de 34 mil millones de dólares, pero solo estará operativo para 2033.
Se espera que la isla albergue una planta de «combustible verde» que luego pueda enviarse a Dinamarca. Es probable que sea una extensión del plan danés de utilizar el excedente de energía eólica para hacer funcionar un electrolizador para extraer hidrógeno del agua de mar sin emisiones de CO2. Y Dinamarca, que es uno de los mayores productores de petróleo de la Unión Europea, espera utilizar esta isla para ayudar a renovar su propia industria energética.
Uno de los objetivos de dicho país es dejar de extraer combustibles fósiles por completo para 2050 y ya ha dejado de ofrecer licitaciones a empresas para futuras exploraciones.
La zona se encuentra en un punto favorable en el Mar del Norte, y por la poca profundidad, es fácil y económico construir turbinas marinas. En 2015, los fuertes vientos permitieron al país generar el 140 por ciento de su demanda total de energía, que luego vendió a los países vecinos.