YouTube está tomando nuevas medidas para proteger a los menores de los contenidos que no son aptos para sus niveles de edad, utilizando para ello su tecnología de aprendizaje automático, en constante evolución, para su localización y correspondiente etiquetado a lo largo de toda la plataforma, habiendo llevado los ajustes necesarios para tratar de que haya el menor número de errores posibles.
La plataforma de vídeos de Google ofrece además un mecanismo de apelación, que permitirá a los creadores y editores que hayan subido vídeos a los que se les haya aplicado las restricciones de edad erróneamente, para que puedan tratar de restituir la situación original.
Además, Google cree que los creadores y editores apenas notarán el impacto de la aplicación de su tecnología en sus ingresos, ya que la mayoría de los vídeos a los que se les aplica las restricciones de edad también violan las pautas de contenido apto para anunciantes.
La plataforma es consciente de que crecerá el número de vídeos con restricciones de edad, y señala que en el caso de que un vídeo con restricción de edad esté disponible en una web de terceros, llevará a los usuarios a su visualización en Youtube, previo inicio de sesión, teniendo en cuenta que YouTube no puede ser usado por menores de edad. En su caso, los menores de 13 años cuentan con la aplicación YouTube Kids, donde en principio los contenidos son aptos.
En el caso de Europa, sus medidas son aún más importantes, ya que tratará de adaptarse a las futuras legislaciones. En este sentido, YouTube irá más lejos a la hora de verificar la edad de los usuarios, por lo que en ciertos casos llegará incluso a pedir una identificación válida o tarjeta de crédito que certifique que con la edad suficiente.
Se trata de un paso adicional que llegará a lo largo de los próximos meses y se ofrecerá «de acuerdo con los Principios de privacidad y seguridad de Google». Las políticas de Google ya han sido actualizadas para reflejar los cambios introducidos en su plataforma.
Curiosamente, este anuncio llega un día después de que conociéramos de que YouTube volvió a recurrir a la moderación humana, ya que sus algoritmos censuraban más vídeos de los necesarios, teniendo que volver a hacer disponibles vídeos que fueron eliminados sin motivo alguno.