A menudo las empresas solicitan patentes de ideas que nunca se transforman en proyectos, pero en otras ocasiones sí lo hacen, siendo así una solicitud de patente una tremenda pista para saber en lo que están trabajando.
Ahora es Porsche la que ha presentado ante la Oficina de Patentes de Estados Unidos dos solicitudes que nos hacen imaginar que están trabajando en aviones autónomos.
La primera patente es la de un avión, mientras que la segunda es de su fuente de alimentación. Los bocetos muestran una nave de despegue vertical que recuerda a los proyectos de taxis autónomos aéreos que hemos visto durante los últimos años.
Porsche ya indicó en 2018 que el transporte aéreo urbano sería común y frecuente a partir de 2025, y esta solicitud de patentes indica que tienen un equipo dedicado al tema, aunque no se sabe de cuántas personas ni de qué presupuesto estamos hablando.
Poco después, ya en 2019, hubo un acuerdo entre Porsche y Boeing para que se estudie el mercado de la movilidad aérea urbana. Uno de los objetivos del acuerdo era estudiar la posibilidad de crear un nave semejante a la que vemos en los bocetos de la patente.
Analizando los dibujos del documento podemos ver una cabina de dos asientos y grandes alas, todo movido con 4 ventiladores de aspas, dos para ofrecer propulsión y dos para aterrizar y despegar. Los diseños también muestran mecanismos para que los ventiladores puedan cerrarse durante el trayecto para no afectar a la aerodinámica.
En el documento se habla también sobre cómo deberían refrigerarse las baterías, un tema extremadamente crítico en este sector, que parece crecer más rápido que el mundo de las baterías.
Aunque la idea final sí es tener taxis autónomos voladores a partir de 2025, de momento solo son conceptos, ideas que muchas veces no salen del papel.