Un grupo de científicos suecos y chinos han desarrollado células solares orgánicas optimizadas para convertir la luz ambiental interior en electricidad.
Lo informan en la Universidad Linköping, donde indican que, aunque de momento la potencia que producen es baja, será suficiente para alimentar los millones de productos que Internet de las cosas traerá durante los próximos años.
Los principales responsables han sido Wuming Wang, estudiante de doctorado, y Jonas Bergqvist, ingeniero de investigación principal en el laboratorio de células solares. Analizaron la necesidad que tendremos cuando se expanda el Internet de las cosas, cuando tendremos millones de productos conectados, tanto en espacios públicos como en hogares. Muchos de estos serán sensores para detectar y medir la humedad, las concentraciones de partículas, la temperatura y otros parámetros. Por esta razón, la demanda de fuentes pequeñas y baratas de energía renovable está aumentando rápidamente, a fin de reducir la necesidad de reemplazos de baterías frecuentes y costosos.
Aquí es donde entran las células solares orgánicas. Son flexibles, baratas de fabricar y adecuadas para fabricarlas en grandes superficies. Su capa absorbente de luz consiste en una mezcla de materiales donantes y receptores, lo que proporciona una flexibilidad considerable para sintonizar las células solares de modo que estén optimizadas para diferentes espectros, para luz de diferentes longitudes de onda.
Comentan en la nota:
Los investigadores describen dos variantes de una célula solar orgánica en un artículo en Nature Energy, donde una variante tiene un área de 1 cm2 y la otra 4 cm2. La célula solar más pequeña fue expuesta a la luz ambiental a una intensidad de 1000 lux, y los investigadores observaron que hasta el 26.1% de la energía de la luz se convirtió en electricidad. La célula solar orgánica suministró un alto voltaje por encima de 1 V durante más de 1000 horas en luz ambiental que varió entre 200 y 1000 lux. La célula solar más grande aún mantenía una eficiencia energética del 23%.
El grupo de investigación Biomolecular y Electrónica Orgánica en la Universidad de Linköping ha sido durante muchos años un líder mundial en el campo de las células solares orgánicas, y seguramente de allí saldrán las fuentes de energía que tendremos dentro de casa para alimentar nuestros electrodomésticos inteligentes del futuro.
Imagen superior genérica de paneles solares, de Pixabay.