Ayer recibimos la noticia de que Google cancelaría la licencia de Android de Huawei, lo que significa que en los futuros dispositivos no tendremos la tienda de apps, ni chrome, ni gmail, ni el resto de software al que solemos estar acostumbrados. Si Huawei quiere seguir usando android, tendrá que usar la opción de código abierto, sin apps de Google.
Pero las malas noticias para Huawei no terminan aquí. Los principales fabricantes de chips también han congelado el suministro de software y componentes críticos para la empresa, cumpliendo así con la represión de la administración Trump que amenaza con ahogar a la compañía de tecnología más grande de China.
Hablamos de Intel Corp., Qualcomm Inc., Xilinx Inc. y Broadcom Inc., empresas que han dicho a sus empleados que no suministrarán a Huawei hasta nuevo aviso.
El viernes pasado la administración de Trump puso a Huawei en la lista negra, a la que acusa de espionaje chino, y amenazó con interrumpir el software y los semiconductores de Estados Unidos que necesita para fabricar sus productos. Bloquear la venta a Huawei de componentes críticos también podría interrumpir los negocios de los gigantes de chips estadounidenses como Micron Technology Inc. y retrasar el despliegue de las redes inalámbricas 5G críticas en todo el mundo, incluso en China.
Intel es el principal proveedor de chips de Huawei, Qualcomm le proporciona procesadores y módems, Xilinx vende chips programables utilizados en redes y Broadcom es un proveedor de chips de conmutación, otro componente clave en algunos tipos de redes. Sin Huawei como cliente, notarán también efecto en sus cuentas de final de mes.
Se cree que Huawei ha almacenado suficientes chips y otros componentes vitales para mantener su negocio en funcionamiento durante al menos tres meses, pero no sabemos muy bien qué ocurrirá después de eso.
En bloomberg.com indican que Huawei se ha transformado en moneda en una guerra comercial. Ahora solo nos toca esperar para ver cómo termina.