Otro de los muchos robots que vimos en el MWC es especialmente encantador. Se trata de Pepper, un proyecto con varios años de existencia que quiso crear a un acompañante diario genuino, cuya cualidad principal es su capacidad de percibir emociones.
Pepper es el primer robot humanoide capaz de reconocer las principales emociones humanas y adaptar su comportamiento al estado de ánimo de su interlocutor.
Actualmente, más de 140 tiendas SoftBank Mobile en Japón están utilizando Pepper como una nueva forma de dar la bienvenida, informar y divertir a sus clientes. Se adapta también a los hogares japoneses, y su aspecto ayuda a que la recepción sea mucho más amigable que con otros robots más realistas.
Gracias a sus muchos sensores, Pepper ve y detecta personas en su entorno, y se acerca a ellos pidiendo interacción. Cuando alguien le mira, lo detecta y comienza a ofrecer ayuda o a dialogar sobre diversos asuntos.
Usa tanto su voz como su cuerpo, y tiene una pantalla que ayuda a ofrecer información de forma gráfica, una tableta que puede ser configurada para que ayude en diversos idiomas.
Al detectar las emociones de la persona que tiene delante, adapta su comportamiento para ayudar a crear una relación basada en la empatía, reconociendo voces y conectándose a Internet para poder ofrecer información adecuada en todo momento.
Uno de los principales objetivos es atraer público en lugares físicos, ofreciendo participar en programas de fidelidad o eliminando dudas de clientes. Empresas como Carrefour o Nescafé ya lo han probado en sus comercios.
Anuncian desde SoftBank Robotics que cuentan con varios socios certificados que pueden crear soluciones adecuadas, y nos indican que, junto a sus otros dos robots, NAO y Romeo, están ya presentes en más de 70 países trabajando en sectores de investigación, educación, comercio, salud, turismo y otros.