Un contrato de futuros es un contrato que obliga a las partes del mismo a comprar o vender algo en una fecha futura con un precio establecido de antemano. El objetivo de estos contratos es protegerse de la oscilación de precios, de forma que si se establece que dentro de un año compraré tantos dólares a tanto precio, por ejemplo, garantizo una estabilidad que me permitirá programarme mejor.
Ahora es el bitcoin el que está a punto de ganar su reconocimiento en este tema, ya que se están realizando los primeros intercambios de productos con su nombre en un mercado financiero.
El Chicago Board Options Exchange (CBOE), una de las plataformas de negociación de contratos futuros de Estados Unidos, iniciará operaciones con bitcoins, de forma que se permitirá prever a qué precio el bitcoin será comprado en un tiempo y, por tanto, apostar por su evolución.
Bob Fitzsimmons, director de contratos futuros de Wedbusch Securities, comentó que algo así es como ver al primer viaje de Uber, un primer paso que puede cambiar el concepto que tiene el mundo sobre el Bitcoin. A partir de ahora se reconoce que el bitcoin es un activo como cualquier otro (dólar, euro, petróleo, gas, etcétera) y que puede ser cambiado, tal y como comenta Nick Colas, especialista en Data Trek Research, en g1.
Después de tres horas del estreno, la moneda virtual subía un 9% y se cambiaba a 16.900 dólares, un nuevo récord.