Aventura off-road divertida y accesible, así se presenta PESU, una bicicleta de montaña que ha superado lo que buscaba en kickstarter, los 100.000 dólares de financiación.
Se trata de una bicicleta de montaña eléctrica que estará presente en dos de las exposiciones de bicicletas más grandes del mundo, Eurobike e Interbike. Quieren diseñar una bici «divertida», con un mejor tiempo de respuesta de la unidad de accionamiento, con un sensor creado por ellos mismos, y patentado en 2015: un tipo de acelerador que determina la cantidad de energía que se debe suministrar al motor en función de la dureza del pedaleo.
Su sensor es capaz de ofrecer un tiempo de respuesta de la unidad motriz de sólo 10 ms, cinco veces menos que otras marcas de Yamaha o Bosch, con un motor de 350w que llega a los 45 km/h, preparado para subir pendientes de 40 grados con facilidad.
Lógicamente, tiene varias marchas, prometiendo ser suficiente para subir cuestas empinadas a bajar a alta velocidad, ajustando automáticamente la energía del motor eléctrico para que no sudemos demasiado.
Con una sola carga puede recorrer 160 km, gracias a un sistema de optimización de batería, y son capaces de ofrecer datos a un ordenador conectado gracias a una pantalla transparente de 3 pulgadas, conectado directamente a la batería. Desde allí podemos leer el nivel de batería, la velocidad, la distancia y el modo de saluda.
Actualmente la venden por 1.500 dólares, pero cuando salga al mercado su precio superará los 2.000.