Apple y Qualcomm siguen peleándose en los tribunales, y ahora ha sido la primera la que ha informado que Qualcomm no tiene derecho a cobrar un porcentaje de las ventas del iPhone, ya que los acuerdos de las licencias no son válidos.
Uno de los principales modelos de negocio de Qualcomm está basado precisamente en las licencias que le permiten obtener porcentaje de los dispositivos que usan sus chips.
Este proceso es una respuesta a la demanda presentada por Qualcomm para investigar si Apple violó un contrato al ayudar a reguladores surcoreanos que investigaban las prácticas de negocio del fabricante de chips, según indican en g1. La acción se basa en una teoría de una decisión judicial de mayo, según la cual se limita el poder de los fabricantes de electrónica para controlar cómo sus productos pueden ser usados ”‹”‹o revendidos. La decisión afectó en su momento a Lexmark al tratar sobre reventa de cartuchos de tinta usados, pero puede ampliarse a otros sectores.
En este caso Apple cuestiona la práctica de Qualcomm de exigir que los clientes firmen acuerdos de licencia de patentes antes de comprar los chips. Qualcomm debería ser autorizada a cobrar licencia de patente del chip o o cobrar por el chip en cuestión, pero no por las dos cosas.
El objetivo es poder comprar chips sin firmar acuerdos de licencia que la obligue a pagar una parte del valor total de venta del aparato, aunque aún estamos lejos de obtener una decisión final sobre el asunto.