El cáncer ovárico es uno de los más difíciles de diagnosticar en sus primeras etapas, ya que la mayoría de los síntomas se presentan cuando la enfermedad está avanzada.
Se han llevado a cabo diferentes investigaciones buscando un método que ayude su la detección precoz, pero no hay nada definitivo que logre este resultado. Siguiendo este línea, el MIT comparte los resultados de un estudio con biomarcadores sintéticos, financiado por diferentes instituciones, que permitirá llegar a un diagnostico temprano de este tipo de tumores en el ovario.
En una primera etapa, ha sido probado en ratones logrando detectar nódulos de 2 mm de diámetro. Si estos mismos resultados son consistentes en humanos, esto daría como resultado adelantar hasta 5 meses la detección de tumores.
Una diferencia más que significativa en cuanto a los métodos actuales para la detección de marcadores tumorales, que abriría un abanicos de posibilidades, para proteger la calidad de vida de las pacientes e incrementando su esperanza de vida.
En la nota del MIT se comparten algunos datos técnicos de este estudio, que si bien se aplica en un primer plano a los tumores ováricos, los investigadores a cargo esperan implementar el mismo enfoque a otros tipos de cáncer.