Cuando Twitter comenzó a transformarse en una fiebre en todo el mundo, comenzaron a aparecer proyectos semejantes con la esperanza de comerse parte del pastel. Pocos lo consiguieron, aunque muchos de ellos liberaron su código para que las empresas puedan usarlo internamente como plataforma de comunicación.
Muchos años después nace Mostodon, un clon de Twitter que, con código libre, comienza a llamar la atención entre algunos círculos, existiendo ya decenas de instancias instaladas en diversos dominios con algunos miles de usuarios en algunas de ellas.
Las más popular de ellas, mastodon.social, cuenta ya con más de 40.000 usuarios, aunque el tráfico es tal que su estructura no consigue aguantar el ritmo, por lo que anima a usar otras diferentes, todas ellas con las mismas funcionalidades e integradas entre ellas.
El objetivo no es quitarle terreno a Twitter y sí permitir que otras personas puedan tener su «twitter particular», con un grupo más reducido de usuarios, siendo ideal para comunicar clubes, organizaciones y otros conjuntos limitados de usuarios, aunque también permite integrar varias instancias comunicándolas entre ellas con lineas de tiempo especiales.
La plataforma ofrece mejores herramientas para la privacidad y la lucha contra el acoso que Twitter. El feed es puramente cronológico, sin anuncios, siendo siempre necesario elegir la instancia a la que nuestra cuenta quiere pertenecer. Podemos registrar una cuenta en tantas instancias como deseemos.
En la interfaz vemos columnas separadas con las notificaciones y la linea de tiempo de las personas a las que seguimos, así como una opción para acceder a una «línea de tiempo local» y otra «federada», donde es posible ver mensajes de usuarios de otras instancias. Los tweets son «toot», aunque la palabra puede cambiar, y los textos pueden llegar a los 500 caracteres.
Las opciones de privacidad también son más variadas, de hecho cada texto puede ser Public, Unlisted, Private y Direct, semejante a los de Youtube.
Cada instancia está especializada en un tema diferente, aunque también las hay genéricas, por lo que si deseáis comenzar a navegar entre ellas, paciencia.