Ya hemos visto como la impresión 3D se está usando en el mundo del motor, y también hemos visto como los coches autónomos están cada vez más en boca de todos, así que ahora vamos a mezclar esos dos mundos para hablar de Olli, el autobús nacido de la impresión 3D, autónomo, y ya mostrado en Maryland, Estados Unidos.
Se trata de Olli, presentado en phys.org como el resultado de una asociación con IBM, un vehículo capaz de llevar a 12 personas, siendo capaz de salir de la fábrica en cuestión de horas siguiendo las instrucciones para imprimirlo en 3D.
Fabricado por la empresa Local Motors, será mostrado en ferias en Las Vegas y Miami, y tienen pensado lanzar a las calles de Berlín, Copenhague y Canberra, varias docenas de pequeños autobuses autónomos.
La compañía indica que este vehículo está listo para entrar en funcionamiento tan pronto como las regulaciones lo permitan, ofreciendo así un servicio a los gobiernos locales o a otros compradores. Pueden fabricar las piezas en 10 horas y montarlo en una hora más, por lo que se podrían hacer cientos de «micro-fábricas» produciendo vehículos en todo el mundo.
La compañía privada cuenta con 45 inversores, y carece de los grandes costes de infraestructura de los fabricantes de automóviles tradicionales, pero no han dado muchos detalles de la tecnología existente dentro de sus vehículos. Se sabe que la conducción se controla mediante un sistema desarrollado por la propia empresa junto a varios socios de software y tecnología, siendo responsabilidad de IBM la interfaz de usuario para que los pasajeros pueden tener «conversaciones» con Olli. El vehículo cuenta con más de 30 sensores y trabaja con los datos existentes en la nube de IBM, y permitirá llegar a sitios definidos por los pasajeros, como restaurantes, por ejemplo, y ser avisados cuando se llegue al destino.
De momento nada se ha comentado sobre la resistencia de los materiales utilizados, algo importante en el mundo del transporte público.