Google quiere que los anuncios que se ofrezcan a través de sus plataformas publicitarias sean realmente beneficiosas para los usuarios. En esta línea, Google lleva tiempo luchando contra aquellos anuncios que puedan causar algún perjuicio a los propios usuarios. Sólo el pasado año, se ha eliminado más de 780 millones de anuncios por diversos motivos, que van desde anuncios engañosos hasta anuncios que llegan a suplantar la identidad de conocidas marcas y productos.
Ahora vuelven a darle una nueva vuelta de tuerca a sus políticas para que a partir del 13 de julio de este año se deje de permitir anuncios de préstamos a corto plazo y productos relacionados a nivel mundial. En este sentido, a partir de la mencionada fecha, ya no se permitirán anuncios cuyo plazo se devolución sea de 60 días o menos desde la fecha de emisión, y además, en los EE.UU., tampoco se permitirán anuncios de préstamos que tengan una tasa del 36% o superior.
Según investigaciones llevadas a cabo por la compañía, resulta que este tipo de préstamos podría dar lugar a casos donde usuarios no puedan hacer frente a las devoluciones de dichos préstamos, ya sea por las propias cantidades a devolver o incluso también por las altas tasas aplicables a dichos préstamos. Acorde a dichas investigaciones, las empresas que ofrecen estos préstamos han incurrido en publicidad engañosa y de forma agresiva durante bastante tiempo.
Esta revisión no afectará a todas aquellas empresas que ofrezcan préstamos para hipotecas, automóviles, estudiantiles, comerciales o líneas de crédito rotativas, según aclara la compañía. Se trata, básicamente, de una medida más que busca proteger a los usuarios frente a anuncios que puedan ser considerados perjudiciales.