Twitter cumple 10 años, y para celebrarlo ha creado un vídeo de poco más de dos minutos recordando algunos de los grandes momentos de esta red de contenido:
Starting in 🇦🇺 on 3/21 and moving across the ðŸŒ, we thank you for 10 incredible years.
Love, Twitter#LoveTwitterhttps://t.co/pH4WWdgK6q
— Twitter (@twitter) 20 de marzo de 2016
En el vídeo tenemos un claro ejemplo de lo que es Twitter, una buena forma de explicar a los millones de personas que no lo usan porque «no lo entienden», porque buscan en Twitter lo mismo que en Facebook, algo que no es posible por la propia naturaleza de la plataforma.
En Twitter hablamos de noticias, hablamos de cosas que están ocurriendo, transmitimos lo que pasa en el mundo, enlazamos y, por supuesto, nos comunicamos, aunque para que sea realmente útil hay que saber a quién seguir y a quién no.
Ese seguramente ha sido uno de los principales problemas de Twitter: no tiene sentido seguir a los mismos perfiles que seguimos en otras redes, ya que en muchas ocasiones nos encontraremos con el mismo contenido. La única diferencia es que en Twitter no dependíamos de un algoritmo que muestre únicamente un porcentaje de todo lo que tenemos pendiente, aunque el nuevo orden de tweets se acerca a ese temido concepto.
Twitter siempre ha tenido problemas de identidad. Nació con el «Qué estás haciendo», animando a los usuarios a que indiquen la actividad realizada en ese instante, después cambió para el «qué está ocurriendo», filosofía que mantiene hasta hoy, y en el camino ha ido queriendo saltar de red social a red de contenido con el objetivo de comer mercado tanto a flipboard como a Facebook. Cuando una plataforma tiene problemas de identidad, se hace más difícil conseguir usuarios, ya que es cada vez más complejo explicar el funcionamiento a los «novatos».
Twitter no está pasando por un buen momento, sus resultado$ no son excelentes, pero su apuesta por el streaming en directo con Periscope está funcionando. Esperemos que sepan encontrar la receta del nuevo éxito.