Castrol (fabricante de aceites de motor para coches) ha llevado a cabo un experimento de lo más sorprendente: unir el mundo real y el virtual en una carrera de coches entre dos pilotos profesionales distintos. Para ello, la compañía ha decidido aprovechar las posibilidades que ofrece el mundo de la realidad virtual.
Tal y como podréis observar en el vídeo que os mostramos más adelante, el experimento que han llevado a cabo consiste en hacer competir a dos pilotos de carreras en dos circuitos separados pero idénticos. Para ello, ambos pilotos han utilizado un casco de realidad virtual que les trasladaba a un circuito virtual en el que se encontraban compitiendo entre ellos. Es decir, podían ver al otro piloto, aunque en realidad se encontraba en el circuito de al lado y no había riesgo real de colisión entre ambos. Además, es importante tener en cuenta que ambos circuitos estaban delimitados solamente por conos, por lo que tampoco había peligro de chocar contra ningún obstáculo (aunque en el escenario virtual sí que existía esa sensación). A pesar de que se trata de una campaña publicitaria por parte del fabricante, no por ello podemos negar lo sorprendente de la misma desde un punto de vista técnico, y es que nos permite hacernos una ligera idea de las posibilidades de la realidad virtual más allá del mundo de los videojuegos y del entretenimiento.
A continuación os dejamos con el vídeo de la carrera: