Después de un estreno en Corea del Sur bastante impresionante (sumaron 30 millones de dólares en las transacciones del primer mes), Samsung Pay llega ahora a Estados Unidos, su primer paso fuera de Corea.
Con una solución creada gracias a la tecnología de LoopPay (compañía que compró por 250 millones de dólares), Samsung no se limita a los pagos basados en NFC, ya que también es compatible con las tarjetas de banda magnética usando lo que llaman Magnetic Secure Transmission. Esta función es muy importante en Estados Unidos, donde solo ahora se está realizando la migración en masa a las tarjetas con chip. El pago se confirma de forma sencilla, ya que solo hay que poner la huella de nuestro dedo después de capturar los datos de la tarjeta (hay una máquina en las tiendas encargada de ese tema).
Por desgracia esta función solo es posible desde sus últimos dispositivos: Galaxy S6, S6 edge, S6 edge+ y Note5, mientras que Android Pay funciona con cualquier móvil con Android 4.4 o superior. Además de ese límite, Samsung Pay solo funcionará con las operadoras AT&T, Sprint, T-Mobile y U.S. Cellular.
Comentan en TC que se han asociado con American Express, Visa, MasterCard, Bank of America, Citi y U.S. Bank, lista aún menor que las presentadas por Apple Pay o Android Pay.
Este sistema de pago estará disponible próximamente en China, España y el Reino Unido, pero aún no han informado fechas específicas.
Podéis obtener más información en samsung.com.