Windows Hello titula el nuevo sistema de autenticación biométrica que presenta hoy Microsoft para ser lanzado en Windows 10. La idea es prescindir de las típicas contraseñas al iniciar sesión en Windows a favor de un rápido y automático análisis del rostro y de los ojos del usuario así como de su huella dactilar. Por si fuera poco, la funcionalidad sería tan útil que hasta serviría como una capa extra de seguridad para acceder a ficheros sensibles, por ejemplo, los empresariales.
Comentan que lo esperado no es solo habilitar el desbloqueo de dispositivos con Windows 10 sino ampliar la experiencia de seguridad biométrica a aplicaciones, archivos, sitios web y servicios. Claro, la magia estaría en sensores especializados -como los infrarrojos que funcionan bajos múltiples condiciones de luz- quienes vendrían incorporados en nuevos dispositivos con Windows, aunque la esperanza para antiguos equipos se mantiene con la mención de que lectores de huellas dactilares, presentes en varios de ellos, podrían funcionar con Windows Hello.
El resto sería trabajo del software que se encargaría de revisar lo capturado para permitir las debidas autenticaciones, eso sí, con las debidas garantías de que no cualquiera, con una foto o algún otro registro inerte, podría saltarse la verificación. Por supuesto, nada mejor que un video para mostrarle en acción:
Sí, a pesar de que no es nuevo el interés por dicha tecnología, resulta interesante verle materializada y a un paso de salir al público en general que en este caso equivaldría a millones de usuarios que tanto en el uso personal de sus dispositivos así como en áreas financieras, de la salud y el gobierno, entre otras, encontrarían grandes beneficios. Por cierto, sería una grata noticia que el Kinect, el dispositivo para Xbox, actuara como hardware suficiente para la identificación segura.
Más información: Blog oficial de Windows