Dentro de las instalaciones de un laboratorio de la Facultad de Medicina de la Universidad de Stanford, es posible encontrar ratones teniendo alucinaciones, pero en este caso por culpa del uso de sustancias psicotrópicas.
Esto, debido a una tecnología láser desarrollada en este lugar, basada en rayos de luz sobre los ratones que causaron la activación de algunas neuronas en ellos, haciendo que observaran patrones visuales que no existían, resultados que generaron el interés suficiente para ser publicados la revista Science.
Con el uso de esta técnica, los científicos esperar obtener indicios que les permitan determinar con exactitud el trabajo llevado a cabo por los miles de millones de neuronas para percibir de manera consciente el entorno, resultado que con el tiempo servirá para desarrollar nuevos tratamientos para trastornos psicológicos, así como alucinaciones.
Inicialmente en el año 2000, El Dr. Karl Deisseroth, junto con otros científicos, habían creado neuronas en el cerebro de ratones vivos para, posteriormente, encenderlas al ser expuestas a un destello de luz, aplicando así, el concepto de optogénica. Tras una serie de modificaciones, el Dr. Deisseroth y el resto de científicos diseñaron un nuevo dispositivo emisor de rayos de luz roja, con la capacidad de impactar docenas de neuronas cerebrales de manera simultánea.
Con el propósito de poner a prueba este sistema, el Dr. Deisseroth y sus colegas, se enfocaron en el proceso llevado a cabo por el cerebro para percibir el mundo visual, donde, al ser la luz captada por el ojo desencadena la activación de terminaciones nerviosas en la retina, haciendo que se produzca el envío de impulsos eléctricos hacia la parte posterior del cerebro.
En ese momento las neuronas presentes en la corteza visual procesan estos impulsos y los interpretan para generar una imagen de la realidad percibida a través del ojo.
Tomando en cuenta esto, los científicos instalaron dos genes en la corteza visual de los ratones: uno de ellos reaccionaba al ser expuesto a la luz roja del láser, mientras que el otro provocaba que las neuronas generaran un destello verde cuando eran encendidas, siendo estas acciones una guía usada por los científicos para realizar el rastreo de la actividad neuronal en respuesta de los estímulos.
Esperemos que todo esto acabe ayudando a mejorar a la humanidad y no sea solo un experimento más donde siempre acaban sufriendo los mismos.