El mundo de la inteligencia artificial sigue en constante evolución y, con ello, emergen nuevas plataformas que prometen transformar la manera en que interactuamos con la tecnología. Uno de los nombres más recientes en captar la atención global es Manus, un agente de IA desarrollado por la startup china Butterfly Effect. Desde su lanzamiento en fase de pruebas, ha generado un revuelo impresionante, con miles de usuarios clamando por una invitación para probar sus capacidades. Sin embargo, ¿es realmente la revolución que muchos aseguran o estamos ante otro caso de publicidad inflada?
¿Qué es Manus y qué lo hace especial?
A diferencia de los chatbots tradicionales o los modelos de IA que simplemente generan texto, Manus se presenta como un agente autónomo, capaz de llevar a cabo tareas complejas sin supervisión constante. En otras palabras, no solo responde preguntas, sino que también puede ejecutar acciones en nombre del usuario, como investigar en internet, redactar informes, reservar vuelos y hasta programar software.
Uno de sus puntos fuertes es su capacidad de combinar diferentes modelos de IA ya existentes, como Claude de Anthropic y Qwen de Alibaba, optimizándolos para cumplir con tareas específicas. Según sus desarrolladores, esta tecnología permitiría que Manus no solo genere ideas, sino que también las lleve a cabo, creando un puente entre la concepción y la ejecución.
El furor por Manus: entre la curiosidad y la exclusividad
Desde su lanzamiento en marzo de 2025, el entusiasmo por Manus ha sido descomunal. Su servidor oficial en Discord superó los 138.000 miembros en pocos días, y las invitaciones para acceder a la plataforma se han vendido en el mercado negro por miles de dólares en aplicaciones chinas de reventa.
Parte de esta fascinación proviene de la percepción de que China está logrando avances significativos en la inteligencia artificial, desafiando a compañías occidentales como OpenAI y Google. En medios chinos, Manus ha sido promocionado como «el orgullo de la tecnología nacional«, aunque la realidad de su funcionamiento aún genera dudas.
Las promesas vs. la realidad
Si bien las primeras pruebas han mostrado que Manus tiene una capacidad impresionante para investigar y generar informes detallados, también han surgido problemas. Algunos usuarios han reportado que se bloquea con facilidad, se enreda en bucles de errores y, en muchas ocasiones, no logra completar tareas básicas.
Por ejemplo, un periodista de TechCrunch intentó usar Manus para ordenar un sencillo sándwich de pollo en un restaurante cercano. El resultado: tras 10 minutos de procesamiento, la IA se colapsó y no pudo realizar la compra. Un caso similar ocurrió cuando intentaron reservar un vuelo de Nueva York a Tokio, donde Manus simplemente arrojó enlaces a aerolíneas en lugar de concretar la compra.
Estos errores han llevado a que algunos analistas cuestionen si realmente Manus representa un avance significativo o si simplemente es otro intento de marketing para generar hype en el sector de la IA.
¿Por qué Manus ha generado tanto impacto?
A pesar de sus limitaciones, es innegable que Manus ha captado la atención de la comunidad tecnológica. Parte de su éxito se debe a:
- Exclusividad: El hecho de que solo unos pocos puedan acceder a Manus ha creado un aura de exclusividad que aumenta su deseo.
- Comparaciones con DeepSeek: Muchos han comparado Manus con el modelo DeepSeek de China, que logró notoriedad por sus avances en IA a principios de 2025.
- Apoyo de influencers: Varios expertos en IA han promovido Manus en redes sociales, compartiendo sus experiencias con la plataforma.
- El auge de las IA autónomas: Cada vez más empresas buscan herramientas que puedan realizar tareas sin supervisión, y Manus se presenta como una solución atractiva.
¿Hacia dónde va Manus?
Butterfly Effect ha asegurado que está trabajando para mejorar la estabilidad de Manus y ampliar su capacidad de procesamiento. Además, han prometido liberar parte del código fuente en un futuro, lo que podría hacer que la comunidad de desarrolladores contribuya a su evolución.
No obstante, el desafío de Manus sigue siendo demostrar que realmente es funcional en escenarios del mundo real. Si no logra superar sus problemas actuales, podría quedar relegado a la categoría de «experimentación interesante» en lugar de ser un verdadero competidor en el mercado de agentes de IA.
Desde WWWhat’s New, creemos que Manus es un proyecto con potencial, pero que aún está lejos de ser la revolución que algunos aseguran. El tiempo dirá si esta tecnología logra consolidarse como un referente en la autonomía digital o si solo fue un fenómeno pasajero.