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Un nuevo océano se está formando, esto es lo que dicen los científicos

Ilustración científica mostrando la formación de un nuevo océano en el Cuerno de África debido a la separación tectónica en el Valle del Rift, con anotaciones de las placas somalí y nubia y la expansión de la grieta.

Hay un fenómeno geológico que está ocurriendo en el Cuerno de África desde hace años, y que pocas personas conocen.

Todo ocurre en un pequeño pueblo rural llamado Mai Mahiu, ubicado a unos 50 kilómetros de Nairobi, Kenia. La tierra, bajo la influencia de fuerzas tectónicas, comenzó a abrirse de manera alarmante el 18 de marzo de 2018, tras semanas de lluvias intensas, inundaciones y temblores. Este suceso no solo ha tenido un impacto directo en las vidas de las personas, obligando a muchas familias a evacuar, sino que también ha revelado una realidad más grande y fascinante sobre la naturaleza cambiante de nuestro planeta.

La enorme grieta que se ha formado en esta región es solo una parte de una serie de fracturas asociadas al Valle del Rift de África Oriental, una falla tectónica que se extiende por más de 3.000 kilómetros, desde el Golfo de Adén en el norte hasta Zimbabue en el sur. Este valle está dividiendo la placa africana en dos, conocidas como la somalí y la nubia, y está en el corazón de un proceso geológico que podría, en millones de años, dar lugar a la formación de un nuevo océano.

El Valle del Rift es especial porque nos permite observar «en vivo» las diferentes etapas de la fisuración continental, un lujo que no muchos rifts en el mundo ofrecen.

La actividad tectónica en esta región no es un fenómeno nuevo. Comenzó en la región de Afar, al norte de Etiopía, hace unos 30 millones de años y desde entonces se ha estado propagando hacia el sur. Lo que hace que esta grieta sea de particular interés es que actualmente estamos presenciando cómo la litósfera, la capa exterior sólida de la Tierra, se está estirando y adelgazando hasta el punto de una ruptura casi completa.

Mirad el vídeo en este tweet:

La posibilidad de que un nuevo océano se forme como resultado de este proceso es algo que captura la imaginación. Según la geóloga Lucía Pérez Díaz, una vez que se produzca la ruptura completa, el agua comenzará a llenar la grieta, y con el tiempo, este nuevo cuerpo de agua se extenderá a lo largo de toda la falla. Esto resultará en que el continente africano se haga más pequeño, dando lugar a una gran isla en el Océano Índico compuesta por partes de Etiopía y Somalia, incluido el Cuerno de África.

Este proceso es un recordatorio de que la Tierra está lejos de ser un sistema estático. Está constantemente cambiando, remodelando sus continentes y océanos en escalas de tiempo que desafían nuestra comprensión habitual del tiempo. Para mí, este tipo de conocimiento pone en perspectiva la pequeñez de nuestra existencia en comparación con la vastedad y dinamismo del planeta que habitamos.

Si bien es cierto que estos cambios ocurren en escalas de tiempo que superan con creces la vida humana, no dejan de ser un testimonio de la increíble capacidad de la Tierra para transformarse. Nos recuerda la importancia de observar, estudiar y respetar los procesos naturales que rigen nuestro mundo.

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