Hace pocas horas el gran Bill Gates dio su opinión sobre algunos temas relacionados con la pandemia y el cambio climático. Dejó claro que la lucha contra la pandemia es mucho más sencilla que la que tendremos que realizar para luchar contra el cambio climático, y comentó algunos asuntos que vale la pena mencionar.
Su opinión es importante por varios motivos. Bill Gates hace ya mucho tiempo que está trabajando en la lucha contra la malaria, y conoce suficientemente el sector de la ciencia y de la tecnología como para poder hablar con conocimiento de causa.
El caso es que en un artículo publicado en la BBC hemos podido leer bastante sobre el momento que estamos pasando y el que tendremos que pasar para ponerle tiritas al planeta y poder convivir con la naturaleza «como amigos». Son algunas afirmaciones que también se pueden leer en su nuevo libro nuevo «Cómo evitar un desastre climático».
Veamos algunas de las frases:
– Resolver el cambio climático sería lo más asombroso que haya hecho la humanidad. En comparación, poner fin a la pandemia es «muy, muy fácil».
– Nunca hemos hecho una transición como la que tendremos que realizar en los próximos 30 años.
– Las fuentes renovables como la eólica y la solar pueden ayudarnos a descarbonizar la electricidad, pero eso es menos del 30% de las emisiones totales. Hay que concentrarse en la producción de acero, cemento, sistemas de transporte, producción de fertilizantes y mucho, mucho más.
– El cambio tiene que comenzar con los gobiernos. Por el momento, el sistema económico no calcula el costo real del uso de combustibles fósiles.
– Es necesaria una gran inversión por parte de los gobiernos en investigación y desarrollo para permitir que el mercado de nuevos productos y tecnologías crezca, ayudando así a bajar los precios.
– Consumir menos cosas (menos vuelos, comida local, menos electricidad y gas) no resolverá el problema. Comprar un automóvil eléctrico, una hamburguesa hecha con un sustituto de la carne o una bomba de calor eléctrica para el hogar, ayudará a aumentar la producción de estos productos y, por lo tanto, ayudará a bajar los precios.
– La demanda global no se reducirá, no vale la pena invertir esfuerzo para intentar conseguir algo que no ocurrirá.
– Dejar de tener un jet privado no es la solución. La respuesta tiene que ser tener un tipo de combustible de aviación que no cueste mucho más y que tenga cero emisiones y que tengan que ser biocombustibles o combustibles eléctricos o quizás usar hidrógeno verde para impulsar el avión.
– La generación joven tiene una «convicción moral» de que deben participar para lograr un cambio en el tema del medio ambiente.
– La esperanza es que «tengamos un poco de suerte» y logremos desarrollar nuevas tecnologías innovadoras que realmente resuelvan las áreas difíciles. Muchas veces, la innovación nos sorprende de manera positiva.
Como veis, no son soluciones, son empujones, ya que el motor de la solución está en la fuerza política, y en nosotros, responsables por los votos.