Facebook está siendo demandado por, supuestamente, espiar a los usuarios de Instagram gracias al uso no autorizado de las cámaras de los teléfonos móviles donde dicha app está instalada.
En julio se supo que Instagram tenía un error, accedía a las cámaras del iPhone incluso cuando no se estaba usando. El problema se comentó con detalle en varios medios, e Instagram dijo que ese bug estaba ya siendo solucionado.
El problema es que mucha gente no creyó la escusa del error, aunque Facebook quiso dejar claro que se debía a un problema del software con notificaciones falsas y que en ningún momento se capturaban fotos de los usuarios sin permiso.
El error ha hecho que se presente una demanda en un tribunal federal de San Francisco. En este caso ha sido una usuaria de Instagram, quien sostiene que el uso de la cámara por parte de la aplicación es intencional y se realiza con el propósito de recopilar «datos lucrativos y valiosos sobre sus usuarios a los que de otro modo no tendría acceso».
Dice la denuncia:
Al obtener datos personales extremadamente privados e íntimos sobre sus usuarios, incluso en la privacidad de sus propios hogares, Instagram y Facebook pueden recopilar información valiosa e investigación de mercado.
Aunque es una demanda de una persona contra un gigante, no es la única que enfrenta. Hace pocas semanas Facebook fue acusado de usar tecnología de reconocimiento facial para recolectar ilegalmente los datos biométricos de sus más de 100 millones de usuarios de Instagram. Facebook negó la afirmación y dijo que Instagram no usa tecnología de reconocimiento facial.