Llega un nuevo jarro de agua fría para la reputación de Facebook. Ahora, grupo de pequeños anunciantes acusan a la compañía de que la misma tuvo conocimiento durante más de un año del error en sus métricas de medición de visualizaciones de vídeos, inflando los datos de visualización, dándose a entender que los usuarios pasaban más tiempo con los vídeos en Facebook que a través de otras plataformas como YouTube, consiguiendo con ello aumentar el interés de los anunciantes en Facebook en detrimento de la competencia.
Según la investigación inicial llevada a cabo, Facebook solo tuvo en cuenta las visualizaciones de más de tres segundos en los vídeos a la hora de calcular la duración promedia de visualización, dejando de lado las visualizaciones de menos de tres segundos, dando como resultado datos inflados sobre el promedio de visualización.
El caso es que Facebook reveló los problemas de sus métricas en el año 2016, y lo reveló como un descubrimiento reciente, aunque la documentación que obra en poder de los anunciantes, obtenidos como parte de los procedimientos judiciales, que consta de unas 80.000 páginas de registros internos de Facebook, señalan todo lo contrario, encontrando evidencias de que Facebook ya era consciente del problema desde hace más de un año antes de su revelación pública. Esto ha llevado a que un grupo de anunciantes presentasen una queja enmendada este pasado martes.
Por su parte, Facebook se defiende y señala que el error en las métricas no ha dado como resultado errores en la facturación o sobrecargos a los socios. The Wall Street Journal recoge las palabras de un portavoz de la compañía en la que señala que «las sugerencias de que de alguna manera intentamos ocultar este problema a nuestros socios son falsas», a lo que añade que «le informamos a nuestros clientes sobre el error cuando lo descubrimos, y actualizamos nuestro centro de ayuda para explicar el problema».
Desde la compañía se sostiene que la demanda del grupo de anunciantes carece de fundamento.