Ya estamos acostumbrados a que Google, una vez lance una nueva versión web de cualquiera de sus servicios, mantenga un tiempo prudencial permitiendo a los usuarios alternar entre la versión clásica y la nueva versión, hasta llegar a un punto en el que lleva a los usuarios rezagados a la nueva versión, eliminando de un plumazo la versión clásica.
Esto es lo que va a volver a suceder con la nueva versión web de Gmail. Y es que Google acaba de publicar su hoja de ruta para realizar la transición a la nueva versión web, completando la misma durante el mes octubre, momento en el que ya no será posible volver a la versión clásica.
Esta hoja de ruta está enfocada a los usuarios empresariales de G Suite, no haciendo mención al respecto de los usuarios finales, aunque es probable que puedan recorrer un camino similar.
Google espera tener la nueva versión web de Gmail bajo disponibilidad general durante el mes de julio, sin fecha concreta especificada. Cuando ello ocurra, los administradores podrán llevar a sus usuarios inmediatamente a la nueva versión, aunque aquellos usuarios que no lo deseen, podrán permanecer en la versión web clásica de GMail por doce semanas más, transcurridos los cuales, serán migrados, y aquellos que ya estén en la nueva versión ya no podrán volver a la versión clásica.
También pueden dar la opción a que los usuarios opten por probar la nueva versión en el momento que escojan o, y esta es la opción predeterminada, esperar unas cuatro semanas y darles a los usuarios automáticamente la opción de ir a la nueva versión.
Cuando transcurran ocho semanas desde que se lance la disponibilidad general, todos los usuarios serán migrados automáticamente, aunque aún tendrán cuatro semanas más para volver a la versión clásica. Ya durante el mes octubre se espera que todos los usuarios estén en la nueva versión web de Gmail sin opción a volver a la versión clásica, la cual, previsiblemente, desaparecerá.