Tienes montones de ropa vieja, papelería, muebles, equipos electrónicos y otras cosas que ya no usas, le tomas una foto, abres tu aplicación de mensajería, hablas con un contacto especializado que irá hasta tu casa a recogerlas y pagas por el favor luego de que finalice su proceso de donaciones y reciclaje por el que dichos artículos pasarán.
Así funciona Delete, un servicio funcionando inicialmente en parte del territorio norteamericano (San Francisco, Oakland y Berkeley) el cual, con apenas una comunicación vía mensajes de texto u opcionalmente con llamadas de voz, se encarga de enviar un camión para recoger y darle utilidad a esas cosas que ya solo estorban.
En efecto, destaca de los servicios clásicos el contar con un limpio y claro proceso de reciclaje, con alianzas para el manejo de materiales como el que compone a los electrónicos, relaciones con organizaciones sin ánimo de lucro como el Ejército de Salvación y librerías públicas, y un veloz proceso de valoración y recolección.
Señalan en VentureBeat que el prometedor servicio ya ha conseguido más de un millón de dólares en financiación, siendo capaz de recoger, reciclar y donar casi todos los residuos hogareños y de comercios; el «casi» es por pianos, coches y otros objetos que pueden requerir de un servicio aún más especializado para su tratamiento.
Más información: Delete.ly