¿Y si tu auto flotara sobre cuatro esferas magnéticas que se pudieran mover en todas las direcciones y se adaptaran a las condiciones de la carretera de manera automática? ¿Y si fuese posible tener un coche como el que maneja Will Smith en «Yo, robot» característico por sus llamativas ruedas sin límites de movimiento?
En Goodyear, la famosa compañía de neumáticos, ya se lo han planteado, y en el International Motor Show de Ginebra, Suiza, han deslumbrado con un brillante concepto de llanta titulado Goodyear Eagle-360 enfocado en vehículos autónomos.
Se menciona una tecnología de levitación magnética, textura tipo esponja para adaptarse a terrenos húmedos y secos de manera inteligente -con sensores para además ajustar la velocidad al encontrar tales condiciones- y diferentes versiones según la ubicación y características del terreno -seguramente, para ambientes extremos-. Por supuesto, se fabricarían con ayuda de impresoras 3D.
Un mejor agarre, óptima maniobrabilidad, movimientos más fluidos, comunicación con las ruedas de otros vehículos para «avisarles» sobre las condiciones encontradas y una «danza maravillosa» a la hora de querer parquear el vehículo son otras de las delicias destacadas en su video promocional:
Lo malo es que como es un concepto, mucho queda por resolver: Cómo atender a zonas extremas, saber si las llantas serán completamente sólidas o serán huecas -caso en el que se dispondría de un espacio aprovechable, por ejemplo, para ir lavando la ropa o batiendo un jugo (?)-, conocer su tiempo de vida/desgaste, etc.
Lo que sí está claro es que de hacerlo efectivo, se habrá reinventado la rueda, literalmente.