En muchas ocasiones, cuando nos registramos en una web «para probarla» tenemos que dar nuestra dirección de email, sin saber a manos de quién llegará dicha información. De hecho muchas veces las bases de datos de muchas empresas acaban cayendo en el «mundo spam», ya sea porque han sido robadas o porque han sido vendidas.
Os dejamos aquí tres trucos que podéis usar para evitar que el spam siga creciendo a medida que os registráis en más y más sitios:
– Usar maskbot: Se trata de un servicio, no gratuito, que nos permite crear una cuenta de email @maskbot.com para registrarnos en cualquier sitio. Todos los emails que llegan a esa nueva cuenta se reenviarán de forma automática a nuestra dirección real, pero en todo momento podemos bloquear remitentes para que no lleguen mensajes de ciertas direcciones o servicios. También podemos responder emails con maskbot, garantizando así el anonimato en nuestras respuestas.
– Usar un email diferente para cada servicio, de forma automática: Podemos comprar cualquier dominio y usarlo únicamente para crear cuentas del tipo sitioWeb1@dominio.com, sitioWeb2@dominio.com, etc… No es necesario crear una cuenta para cada sitio web, ya que podemos configurar la cuenta para que cualquier envío a LoQueSea@dominio.com llegue a nuestra dirección real. La ventaja de esta técnica es que si nos registramos con el email NuevaRed@dominio.com en el sitio NuevaRed.com, si posteriormente recibimos spam a esa cuenta ya sabemos que es por causa de ese sitio específico. Por otro lado tiene grandes ventajas de seguridad: si roban los datos de una web, no obtendrán información de nuestro email real, y mucho menos una combinación email/password.
– Usar emails temporales: El problema de esta solución es que perdemos la posibilidad de recibir mensajes futuros del servicio al que nos hemos suscrito, pero la ventaja es enorme, ya que hay cientos de soluciones de emails temporales gratuitas que pueden empezarse en pocos segundos (yopmail, getairmail, guerrillamail, 10 Minute Mail, Mailinator, Spambog, etc.)