Drones para volar por encima de la selva en busca de zonas quemadas o destruidas por el ser humano, esa es la base de un proyecto anunciado hoy en Brasil: Ecodrones.
Se trata de una iniciativa del Instituto Chico Mendes de Conservación de la Biodiversidad, ICMBio, y de la organización WWF-Brasil, proyecto que pretende transmitir imágenes en tiempo real de zonas que están sufriendo ataques de forma ilegal (ya sea para obtener madera o para crear áreas de cultivo).
De momento ya cuentan con el modelo Nauru 500, con autonomía de 4 horas de vuelo y posibilidad de alejarse hasta 80 km del punto de origen (ya usado en otras regiones de Brasil). Están ahora esperando que la Agencia Nacional de Aviación Civil apruebe otros dos modelos, pero no hay fecha definida para esa liberación.
El problema existente hoy es que muchos de los madereros ilegales bloquean el acceso por tierra poniendo troncos en los caminos, algo que se evitará con este tipo de drones.
El proyecto cuenta con la colaboración técnica de la Universidad Federal de Goiás y de ONG internacionales que fabrican equipos para este tipo de actividad, según leemos en globo.
Ya han definido las principales áreas que serán monitorizadas, todas ellas en el llamado eje de la BR-163, que une Cuiabá, Mato Grosso, a Santarém, Pará.