Veamos, analicemos desde la perspectiva de los contenidos el cambio de paradigmas asociados no sólo al mundo de los negocios, sino y principalmente, a la forma en la que nos comunicamos o relacionamos.
Hoy, no sólo somos clientes, somos además productores, tenemos el poder de decisión y el poder de innovación y hemos adquirido ”“ gracias a la libre circulación de información y la facilidad con la que nos relacionamos- la capacidad para generar comentarios que emergen como el veredicto de las acciones que realizan las empresas.
La capacidad para utilizar las nuevas tecnologías de forma que se optimicen las acciones, los tiempos y la consecución de objetivos, no sólo resulta eficiente en el marco de los negocios y los clientes, trasladado al constante proceso formativo al que nos vemos avocados, resulta, simplemente indispensable.
• El nuevo consumidor es multi plataforma. Visualiza un capítulo de su serie favorita en la televisión mientras comparte en Twitter las últimas escenas y debate en Factbook sobre la evolución de la serie…
• El multi dispositivo. El consumidor actual está conectado de forma simultánea a múltiples dispositivos, a través e los cuales consulta, se informa, se divierte e interactúa.
• Proactivo. Adicionalmente, es el consumidor actual quien decide con quien se relación, con qué marcas habla y qué acciones considera invasivas o irruptivas. es proactivo en las conversaciones y no tiene ningún reparo a la hora de manifestar su opinión.
• Híper conectados, 24*7 y 365 días. Vivimos conectados, cada acción realizada es compartida en las redes, cada noticia sucedida es conocida de inmediato, cada experiencia, foto familiar, viaje, hecho y situación, constituye nuestra huella digital, una prolongación que define la nuevo ser humano.
• El nativo digital tiene interiorizados los conceptos de lealtad, compromiso y honestidad.
Todo lo anterior nos permite ahondar en cómo influyen estas cualidades en el marketing de contenidos y cómo las marcas pueden aprovechar estos nuevos hábitos en el crecimiento de su empresa.
La demanda de contenido es cada vez más potente. Los mensajes de marca se construyen en acción conjunta con sus clientes y es a través de ellos que se logra la emoción que desencadena la decisión de compra. Es por ello que podemos concluir que, una campaña de marketing de contenidos que apunte a un target compuesto eminentemente por nativos digitales, debe prestar atención a los siguientes principios básicos, extraídos del análisis de sus hábitos, gustos y costumbres.
“Hacer algo útil” Cuando un consumidor demanda sentirse valorado, lo que persigue además del compromiso de la marca, es la generación que algo que resulte de “utilidad para su comunidad”. Es por ello que los contenidos empáticos que muestran situaciones cotidianas, obstáculos en los procesos o soluciones para las preocupaciones, alcanzan un nivel de impacto muy relevante.
El valor agregado de ser social. Por lo que establecer vínculos directos con nuestros seguidores del blog, nuestra comunidad de Factbook y nuestro perfil de Twister, no sólo nos muestra como marcas comprometidas con la humanización de la red y las necesidades ajenas, sino y lo que es mas importante, nos sitúa en el equipo de las marcas innovadoras y con valor agregado.
Eficiencia = simplicidad. Pensemos por un momento las cualidades inherentes al ser humano, situémonos delante de la innovación tecnológica y el fenómeno social, que nos entregan dones como la Ubicuidad en cuyo aprovechamiento eficiente, subyace toda la información que necesitamos para crecer. Resulta indispensable que la simplificación sea una constante. Que el contenido sea sencillo, concreto, de impacto y pensado para un consumidor en movimiento.
Un texto de impacto vinculado a una infografía, un vídeo o una presentación, puede ser un aterrizaje perfecto para una estrategia de marketing basado en la geolocalización para negocios locales.
Cada vez más la eficiencia y la calidad de los contenidos es analizada desde la capacidad para innovar, inventar, romper con lo establecido de los creadores de contenidos. ¡Y si no que le pregunten al nuevo Google Penguin!
Confianza= compromisos. Los nuevos consumidores saben que las marcas tienen como objetivo final, vender. Pero también conocen los resultados adversos de años de impunidad y falta de compromisos. Nadie excomulga a quienes hablen de cifras de ventas o quienes muestren su interés por la evolución de su marca, muy por el contrario, resulta evidente y natural. La premisa fundamental para evitar que la pérdida de credibilidad afecte a nuestra marca, la encontramos en la capacidad que desarrollemos para entender que, los objetivos comerciales, no entran a escena mientras no consigamos que el consumidor compre emociones a través e nuestras acciones.
Para finalizar recordemos lo que nos penaliza el nuevo Google Penguin:
• Excesivos enlaces ocultos
• Palabras clave irrelevantes
• Contenido duplicado
• Excesivo SEO para atraer tráfico y mejorar posicionamiento
• Enlaces internos o externos que no complementan la información.
• Páginas que no respondan a las necesidades del consumidor: contenidos y procesos, simples e intuitivos, acceso rápido y fácil a las áreas de interés.
• Páginas cuyo contenido no sea único, relevante y coherente con el mensaje de la marca.
Parece que hasta el buscador ha identificado los nuevos hábitos del consumidor actual y el nuevo modelo comunicacional impuesto con motivo de la fusión del mundo online y offline. ¡Vivimos en el ciclo de las emociones, debemos aprender a relacionarnos y hacer del cliente, el motivo por el que existe nuestra marca y, todos somos clientes!